No me dejes atras [Inosuke x Oc]

Capitulo 44-Primera Vez ¿Experimental?

-¿Qué si quiero qué? - Preguntó Inosuke.

-Que si quieres sentir más calor- Pregunté.

-Mmmmm... - Dijo con mucha desconfianza.

Los dos estábamos sentados sobre una cobija en el suelo, mirando el lago y a toda la luz que la luna reflejaba sobre el agua.

-Confía en mi, si quieres que me detenga, no dudes en decírmelo- Dije.

Inosuke apretó los labios y miró el suelo, creo que sintió mucha vergüenza.

-¿Me- Me va a doler? - Preguntó.

Yo solo rei un poco ante su tierna pregunta.

-Claro que no, tal vez te sientas incomodo al principio, pero... No te va a doler- Dije sonriendo.

-Esta Bien entonces--Dijo Inosuke.

Ese chico puede ser muy rudo y todo lo que veas, pero de verdad puede ser muy sensible a veces, de verdad que no deja de sorprenderme nunca.

Me senté atrás de él y me abrí de piernas poniéndolas de cada lado, pegué mi cuerpo lo mas que pude el suyo.

-A-Aiko, ¿Qué haces ahí atrás? - Preguntó Inosuke muy nervioso.

-Dime, Inosuke, ¿Alguna vez te has masturbado? - Pregunté.

-¿Qué? ¿A Qué viene eso ahora? - Preguntó muy exaltado.

-Solo dime- Dije muy lento mientras besaba su espalda.

-Pu-Pues no- Dijo muy tenso.

-Eso creía, muy bien, voy a hacerlo lento, si quieres más rápido, solo tienes que pedirlo, ¿Está bien? - Pregunté.

-B-bueno-Dijo muy nervioso.

Pasé mis manos por debajo de los suyos abrazandolo por detrás mientras bajaba mis manos muy lento hacia su pantalón.

-¿Quieres qué siga? - Pregunté mientras seguía besando desde su nuca hasta su hombro.

-Mmmm, si-Dijo.

Yo solo sonreía, sabía que mi niño estaba muy nervioso por el momento, pero también se notaba que estaba disfrutándolo.

Mientras masajeaba su abdomen, me di cuenta de lo firme y trabajado que tiene dicha zona, nunca me había tomado el tiempo para admirar su trabajado cuerpo, creo que yo soy la afortunada después de todo.

La verdad yo si tenia un poco de miedo por lastimarlo, ahora que mis uñas son puntiagudas, no quería rasguñarlo o pellizcar algo que no debo, mis alborotadas hormonas demonio no me dejaron pensar el todo.

-Muy bien, aquí voy-Dije.

-Si- Dijo el.

Muy lento, metí mis manos en su pantalón y tomé su miembro que ya estaba un poco duro.