No me dejes atras [Inosuke x Oc]

Capitulo 43- ¿Estas Bien?

-Que hermosa bebé, holaaaa, soy el tío Giyuu- Decía Giyuu mientras miraraba la bebe acostada jugando con su cobija.

Giyuu amaba a los bebés, pero odiaba a los niños, supongo que solo le gustan cuando son chiquitos y babosos.

-Si claro, ya quiero ver que cara pones cuando le limpie su pañal, ni siquiera Tanjiro pudo soportar el olor-Dije riendo.

-No hay problema con eso, dime, ¿Qué fue lo que te hizo querer recogerla? - Preguntó Giyuu.

-Estaba sola, fría y sucia, no entró en pánico al verme, me sentí reflejada en ella, inocente, huérfana, sin conocimiento de nada. No quiero que crezca sintiéndose sola, aquí tiene mucho apoyo, todos somos huérfanos aquí- Dije sonriendo.

-¿O sea que nunca quieres tener tus propios hijos? -

-Yo no dije eso, claro que me gustaría ser mamá, pero ahora debo estar concentrada en cosas más importantes, mi medicina estará lista en un par de semanas y podré ser humana otra vez- Dije emocionada.

-¿Qué tiene de bueno ser mortal? - Dijo Giyuu.

-¿Qué tiene de bueno vivir para siempre? Eso debe ser desastroso-Dije seria.

-Ese es un buen punto, bueno, si quieres visitarme, solo avisa la próxima vez, que tengas suerte con tu... Novio- Dijo Giyuu con las mejillas infladas.

-¡Deja de burlarte! - Dije molesta.

-Adiós Aiko- Dijo Giyuu sonriendo.

Se fue del cuarto dejándome sola con Amaya, Amaya era una bebé muy bonita, por fortuna ella aún no tenía que preocuparse de nada.

-Amaya, nunca crezcas- Dije triste.

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-Buena suerte en su misión, regresen pronto- Dije.

Zenitsu y Kanao tenían que ir a una misión un poco lejos y no iban a regresar en un par de días, tal vez semanas.

Nezuko y Tanjiro estaban muy tristes, de verdad que yo insisto en que esos dos están enamorados, solo que les cuesta admitirlo.

-Adiós chicos, por favor, tengan mucho cuidado- Dijo Nezuko.

-Zenitsu, cuida bien de Kanao- Dijo Tanjiro.

-¿Bromeas? Creo que será Kanao quien cuide a Zenitsu- Dijo Inosuke.

-¿QUÉ DIJISTE? - Gritó Zenitsu molesto.

Inosuke y Zenitsu comenzaron a pelear, como siempre, pero ya nadie los detenía, esos dos eran imparables.

A pesar de esas mini peleas sin sentido, estos días eran más tranquilos de lo normal.

Despertar, cuidar a Amaya, estar con Inosuke, en las noches ir al pueblo a atender gente y por... Comida.

De vez en cuando visitar a Giyuu, que ahora vive una vida casi feliz con su amado.