foster; ns

39

Niall estaba guardando los libros en su taquilla esa mañana antes de ser asustado. Harry se había escabullido a sus espaldas, tomándolo por sorpresa al rodear sus hombros con sus fuertes brazos. Las piernas de Niall casi no pudieron resistir el peso sobre su espalda. Entonces, cuando pensó que su cuerpo se había estabilizado, Harry dejó un sonoro y húmedo beso en su mejilla.

El rostro de Niall se enrojeció, y sacudió sus hombros para deshacerse de su agarre.

Harry se hizo hacia atrás confundido, pero no borró la sonrisa de su rostro. Niall pegó su espalda a las taquillas para evitar otro ataque sorpresa, y abrazó su cuaderno de dibujo contra su pecho. Estaba mirándolo con ojos frívolos.

—¿Qué crees que haces?

Harry se encogió de hombros y su sonrisa se agrandó.

—Te doy los buenos días.

—No. Me diste los buenos días antes del desayuno. Ahora estás siendo raro.

—Te di los buenos días como tu buen hermano temporal. Ahora te doy los buenos días como tu novio.

La expresión impávida de Niall rápidamente se transformó en una escandalizada. Abrió su boca con la intención de decir algo, pero se había quedado sin palabras. Harry continuaba mirándolo, sonriente, pero esa sonrisa luminosa pronto se desvaneció cuando Niall abrazó con más fuerza su cuaderno y continuó caminando por el pasillo a paso rápido hasta desaparecer en el salón de su taller.

• • •

—¿Terminaste? —Zayn inquirió con aburrimiento.

—Aun no —respondió Niall, asomando la punta de su lengua entre sus labios. Tenías el entrecejo fruncido y sus dedos se movían con inseguridad por el cuaderno.

—Niall, llevas intentando dibujarme toda una eternidad. Yo también tengo un retrato que hacer, ¿sabes?

—Ya casi termino. Tus cejas son complicadas, ¿por qué tienes tanto cabello? ¿alguna vez has intentado dibujar un hombre lobo? Estoy tratando.

—Estas cejas son divinas, mi hermana las depila.

—Mhm —Niall masculló, sin escuchar a Zayn realmente, estaba demasiado ocupado intentando terminar la tarea del taller.

Tenían que hacer un retrato de su compañero. Simple ¿no? Para Niall no lo era.

—Tienes los huecos de la nariz muy grandes...

—Yo no sé si estás intentando dibujarme o solo buscas cualquier oportunidad para insultarme.

—Un poco de ambos.

Niall dibujó una línea final y se relamió los labios resecos. Solo faltaban quince minutos para terminar la clase; eso quería decir, que Niall había pasado dos horas intentando dibujar a Zayn.

—Déjame ver —Zayn se levantó de su asiento y se asomó por el hombro de Niall, antes de fruncir el ceño.

—¿Soy yo o es Lord Voldemort?

—No deberías decir su nombre —dijo Niall, con total seriedad, cerrando su cuaderno de un golpe certero y guardándolo.

—Perfecto. Pasaste la clase entera haciendo un dibujo espantoso que parece una versión mía después de haber sufrido quemaduras de tercer grado, y ahora solo quedan quince minutos para terminar mi retrato. Dime, ¿qué quieres que haga?

—Mi dibujo salió bien, se parece mucho a ti, si me lo preguntas.

—Auch —Zayn pretendió estar ofendido, llevándose una mano al corazón—. Hoy has estado más amargado de lo normal. ¿Estás nervioso por la junta de padres?