La Máscara de Anko

Fuera de la aldea

A pesar de casi vivir un año entre shinobis paranoicos en un mundo que se supone es solo ficción, olvidaba por completo guardar su lengua e incitar el peligro hacia su persona.

Su hermana siempre se quejó de su manejo vocal en momentos claves, incluso lanzando los mejores speech que se le pudieran ocurrir.

Pero también tenía un lado filoso cuando su enojo superaba por completo su paciencia natural... no lograba mantener su filtro y lograba herir a las personas, una cualidad no tan óptima en especial cuando a las personas que les estás diciendo sus defectos en realidad pueden matarte.

No lo pensó en ese instante, más si literalmente estaba picoteando al alacrán figurativo que era el consejo y el propio Hokage, siendo despedida de inmediato ante la furia silenciosa de un Danzo Shimura.

Al menos dio sus observaciones y mantuvo su rostro sereno, tal vez se daba unas pocas horas de vida si no es que la logran acusar de traición o favorecer los deseos de su primer maestro...

Orochimaru incluso ahora no deja de salir en discusiones referentes a su estado mental.

Huyendo antes de que la idea de ejecutarla fuera lanzada por el viejo lobo... Sospechaba que Danzo era el más infeliz en el asunto y descubrió que el tema del jinchuriki era más difícil de lo que pintaban en el canon amarrado por hilos políticos que no dejaban a muchos acercarse por "protección".

Caminando si no es que casi corriendo hacia su departamento, con un enojo silencioso de alguien normalmente alegre era algo peligroso más siendo una kunoichi.

Pero no se sentía culpable aún.

Era lo que se merecían si la vida del niño no les importaba más allá de lo que aguardaban sus entrañas... Estúpido.

Rezó a ese dios que la olvidó para que no la apartaran de visitar a Naruto en un futuro, que su vida no fuera más desdichada por su simple intervención y sobre todo que aunque una parte de ella decía que se alejara del protagonista, que no era su asunto y ni era especial...seguía siendo un bebé a sus ojos, sus quejas no fueran echadas a un lado.

Aferrándose a la idea del niño insolente, ruidoso y todo sonrisas que conoció en su historia favorita y no el infante maltratado que fue arrancado literal de sus manos por unos Anbus estúpidos ...sacudió sus pensamientos ahora solo esperando a enfrentar las consecuencias.

Derrumbandose culpable en su departamento.

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-Nunca terminas de meterte en problemas-Un Hatake Kakashi llamó esa noche a su departamento después de que ella esperaba el zapato figurativo caer, curiosa de cómo había sabido su ubicación parpadeando varias veces al jounin infractor que entraba como dueño de la casa.

Insolente.

-Muy buenas noches también a ti - frunció el ceño la ahora Anko para ver cómo el joven miraba alrededor....el único ojo barrio su hogar para terminar en su posición estaba algo tenso y su chakra irradiaba molestia que demostraba con su gesto oculto.

Esto no sería bueno para ella.

-Prepara tus cosas.... -ordenó de nuevo regresando a su carácter severo... No respondiendo el saludo -Nos vamos de cacería -informo.

Iba a preguntar pero su boca se abrió y cerró varias veces para fulminar con vehemencia -Bien -alzó las manos en derrota -¿Esto tiene que ver el hecho que haya cabreado a medio consejo y al Hokage ? - pidió al final no sabiendo su era un secreto o no.

Pero la mirada se encrudecio.

-Apresúrate -ladro Hatake más fastidiado sin darle oportunidad ni respuesta alguna.