Un Inexperto Al Amor

Cap 90

Solo quedaban 9 días para que terminara el año, 5 para que fuera mi cumpleaños y 3 para navidad. Siempre he manifestado mi desánimo y desencanto por estos días en especifico, pero detrás de cada mala palabra y cada crítica en realidad había un deseo desesperado porque algo cambiara mi perspectiva, algo que me hiciera sentir feliz en estas fechas en las que son creadas para estar con alguien especial.

El día estaba bastante aburrido, pretendía tocar la guitarra, practicar un poco unas alabanzas que debía cantar con el coro de la iglesia para navidad y año nuevo, contunuar leyendo un libro y quizás dormir un rato. No quería juntarme con Daniel o Sebastián ya que llevaba varios días juntandome con ellos y a veces hay que dejar un tiempo sin verse para que pasen cosas y así contar anécdotas o cosas interesantes.

Al fin la noche había llegado, lo cual significaba ir a la feria navideña con mi familia, para comprar regalos, ver chicas y sobre todo comer. Esta época del año era la única donde en un lugar habían de todos los alimentos, frutas y dulces que podías querer, de hecho era la principal causa por la que año a año iba.

Mientras caminaba por los puestos, comencé a imaginar que de pronto me toparía con Constanza, por un momento imaginé que la vería justo en frente de mi, ambos nos acercaríamos y lentamente nos daríamos un abrazo... lo sé creo que he visto muchas peliculas románticas, pero auqnue así fuera y aunque sabía que esto no pasaría, seguía observando atentamente a alguna chica que fuese muy blanca, cabello negro largo y gafas negras.

Luego de un par de horas mientras aún comprabamos regalos mientras caminabamos decidimos detenernos un momento para finalmente comer algo.

¿Fajita con carne o anticicho de carne? Este año la competencia principal era entre estos 2 alimentos los cuales me tenían muy maravillado, mientrras que en lo dulce seguía ganando por lejos las manzanas confitadas.

Ya con las compras hechas y con los estomagos llenos decidimos pasar a una plaza para descanzar y tomar algún refrezco mientras surgía algún tema de conversación o anecdota del día.

Mis padres estaban bastantes interesados hablando a cerca de que mi mamá quería comenzar a trabajar, mi hermano estaba jugando con una lata de espuma de colores y sentado en el suelo al lado de ellos estaba yo, intentando conectarme a una señal wifi la cual se encontraba sin contraseña, la señal no era la mejor pero servía para alguna emergencia o un vistado rápido a alguna red social.

Mientras esperaba en silencio que cargaran los mensajes de pronto llegó una a Facebook el cual llamó de inmediato mi atención ya que rara vez hablo con alguien por este medio, más uso Instagram o WhatsApp.

Al abrir el mensaje en una especie de reflejo de pronto grité ¡Perfecto! Bastante fuerte, tanto que mis padres me quedarón mirando y uno que otra persona que por allí pasaba. Era un mensaje de Constanza que decía:

Hola Ysrael... el chico de la PSU ¿Verdad? ¡Al fin te encuentro! Bueno, tú me encontraste ¿cómo estás?.

Para mí el regalo de navidad se habia anticipado y era Constanza mi segura felicidad de estas fiestas... ¿debo calmarme o disfrutar el momento?