Cap 96

10 1 0
                                    

Una, dos, tres y hasta seis citas se concluyeron con Constanza luego de llegar del campamento. Cada una de ellas era igual a la anterior, las mismas conversaciones y hasta los mismos silencios que cada vez se prolongaban más.

Estaba conciente de que nuestra "relación" estaba cayendo lentamente en la cotidianidad, cosa que yo odio bastante.

Por mi parte intentaba siempre idear charlas más  lúdicas, panoramas en otros sitios pero Constanza siempre quería estar donde mismo y hacer lo mismo que era estar abrazados en silencios mirando como el viento movía las hojas de los árboles.

La última cita debo confesar que fui solo por cumplir, no había ni el minimo deseo de volverla a ver.

Si me preguntas el motivo del porqué sucedio esto la verdad creo que fue la estupida rutina la que nos estancó sin avanzar más, nada nuevo surgía entre vosotros, ni siquiera nos habíamos dado nuestro primer beso. El tiempo seguía pasando y luego de reflexionar bastante sobre esto y hablando con amigos había llegado ya a una determinación.

Estaba firmemente decidido a terminar con Constanza ya que no siento lo mismo hacia ella en comparación al principio cuando nos conocimos. No solo fue nuestra rutina, tampoco el que aún no nos dabamos un beso sino que también y con gran peso se asomaba el miedo al compromiso, al pololeo y al ser fiel. Si bien en un principio estaba dispuesto a eso con tal de estar con Constanza, la realidad era que aún no estoy preparado para "amarrarme a alguien" y digo "amarrar" ya que así me siento con Constanza, el mismo hecho de las citas eran cosas que me obligaba hacer Constanza ya que se ponía celosa a veces del que yo saliera mucho. Constanza poco a poco comenzaba a incorporarme en sus planes futuros como: cumpleaños, cenas en su casa e incluso a sus vacaciones en el mes de febrero. Consideraba este detalle algo lindo pero no era lo que yo quería, ahora pienso en vivir el momento y olvidarse del mañana, sé que este pensamiento es algo contrario al de antes pero han pasado bastantes cosas como para darme cuenta que no quiero aun eso, quiero seguir conociendo chicas, divertirme y seguir adquiriendo experiencia.

Constanza por su parte cada vez estaba más ilusionada conmigo, piensa en mi cuando no estoy junto a ella, habla de mi a los demás e incluso a veces me halaga mucho a tal punto de hacerme sentir algo incomodo, siento que me encuentra lo maximo, cayendo en la idolatría, me admira tanto que incluso cuando le contaba algun problema que tenía ella siempre me encontraba la razón y culpaba a los demás, incluso cuando a veces yo era el culpable.

Sabía muy bien que debía terminar con ella cara a cara, esta no sería una desaparición tipica mía en silencio. Por respeto a ella y a nuestra linda historia debía hacerlo así.

Decidí un día antes de juntarme con ella decirle bastante cortante que "debíamos hablar". Esta frase es típica cuando las relaciones se acaban o hay peoblemas serios, por lo cual no era necesario explicar más. Constanza no respondió el mensaje en todo el día, pero si lo leyó, sospecho que captó el verdadero mensaje... ahora lo más dificil tocaba por hacer que era preparar un "discurso" explicando las razones y todas las cosas por lo cual tomé esa decisión, esta era la primera vez que debía hacer esto y me ponía muy nercioso porque sabía como podía actuar Constanza y esta forma no era buena, ni calmada, sospecho que será mas dificil de lo que puedo ahora imaginar, pero debo y quiero hacerlo, aunque no sea esta una buena decisión.

Un Inexperto Al AmorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora