Descendientes - Más allá de la cascada

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INTROCUDIR CANCIÓN CUANDO SE LE INDIQUE

—LA PRINCESA VALIENTE X—



— a unas cuantas olas más podrás ver la isla —Peyton estaba a un lado de Harry mientras le dirigía a donde debía ir.

Por nuestra parte, tanto Tristán como Ryan ayudaban a los cinco tripulantes de Harry a encargarse de Estribor y Babor, cosas que mis queridos príncipes no sabían hacer, pero Harry les intentaba indicar desde el timón como hacerlo.


INTRODUCIR CANCIÓN AQUÍ

— ¿estás seguro que está cruzando un charco de agua? —

Peyton miró con recelo a Harry y suspirando dijo por tercera vez— es una cascada, no un charco de agua —bufo— solo sigue —

— este viaje me pone tan emocionada —Andy saltaba hacia el costado del barco y con un impulso se alejó de él y sonrió contenta subiendo las sogas tejidas que llevaban al cubículo en la parte superior del barco, donde todo podía ser visible y donde un hombre parecía vigilar todo el parámetro. Y con un suspiro llegando al lado del hombre desconocido, Andy dijo— Hoy los vientos han llamado y el cielo claro está —tomo por el hombro al chico a su lado y lo hizo moverse de un lado a otro, la miré perpleja mientras la veía sonreír y saltar para bajar nuevamente por las escaleras, bajando a gran velocidad y moviendo su melena de un lado a otro mientras sentía el viento en su rostro, me aleje de la zona, no fuera a ser que Andy me tomará desprevenida, pero fue Ryan quien a su mala suerte paso a un lado de Andy y ella dio giros junto a él, guarde mi risa.

— Andy no hagas esto, me mareo —Andy soltó a Ryan y fue Tristán quien le tomó las manos y le sonreía, ahora daba vueltas con Tristán, Ryan bufaba.

Secretos en el bosque, los montes salvajes son, los lagos reflejando, el tiempo que pasó —Tristán asentía ante todo lo que cantaba Andy mientras le hacía dar vueltas sobre su mismo eje y Andy disfrutaba.

— es la canción favorita de Andy —fruncí mi ceño ante Ryan quien se ponía a mi lado— la canta cuando está entusiasmada, casi siempre cuando anda a caballo —abrí mis ojos de sorpresa.

Ella tenía una canción favorita.

cabalgar, a volar, viento y cielo alcanzar, a volar, viento y cielo alcanzar —Andy entonces estaba entusiasmada, subió las escaleras en dirección a Peyton y Harry quienes la veían venir, mientras Peyton sonreía, Harry la miraba incrédulo, pero al fin y al cabo creo que era lo que menos importaba, porque Andy se subía sobre la proa del barco a cantar a todo pulmón y con una sonrisa en sus labios— a volar, viento y cielo alcanzar —ella estaba muy feliz, su rostro estaba rojizo, el viento pegaba perfectamente en su aura.

— estamos por llegar a la isla —masculló Peyton, todos dirigimos nuestras miradas hacia la dirección que señalaba y tal como Peyton lo había mencionado, una isla se alzaba tras nosotros, hermosa en vegetación y fructífera al parecer.

— todos atentos —suspire en cuanto Harry anunció y sus piratas se mantuvieron alineados en cuanto Harry estaba en la entrada de la isla dispuesto a introducir su barco en la gran cascada del interior que Peyton decía que tenía la isla.

— vaya, este lugar parece mágico —masculló Ryan a mi lado, me crucé de brazos.

— Todo aquí es mágico —musité compensado con una sonrisa, quise mirar atrás y tan solo a una simple mirada pude ver como dejábamos los Estados Unidos de Auradon para ir a un nuevo reino.

Más allá de la cascada.

— ¿estas lista? —el susurro de Tristán hizo erizar mi piel, pero en cuanto enlazó sus dedos con los míos asentí con una sonrisa oportuna.

Siempre estaría lista, para cualquier situación.

— MEIDO —la voz de Peyton me alcanzó en la oscuridad, fruncí mi ceño— el barco debe ser llenado con polvillo de hada.

Abrí mis ojos estupefacta— ¡¿HASTA AHORA DICES ALGO ASÍ PEYTON?! —grite con ira.

— toma mi polvillo de hada y... —la cascada, podía oírla, ya estaba muy cerca, su agua cristalina que caía cada vez más y más rápido— sino lo hacemos caeremos en picada —

¡¿CAER?!

Gruñí— Diaval, toma el polvillo y encargate de Babor, yo tomaré un poco y lo esparecere en Estribor —Diaval asintió.Cerré mis ojos y deje que la sangre dentro de mi se agitase, que el poder maligno de Maléfica se manifestará y me concediera las alas, mis ojos ardían cada vez más, suspiré— tú puedes —masculle.

Abrí mis ojos y enfoque las alas de Diaval sobre todos, cómo ocasiona un gran viento— VEINTE SEGUNDOS PARA EL IMPACTO —anunció a gritos ciego Harry.

Fruncí mi ceño y tome la bolsa que Diaval me había extendido, pues lo bueno de estar en mi forma demoniaca es que podía ver en la oscuridad, el polvillo empieza a brillar en la oscuridad y el barco de Harry adquiere ese brillo, se pegan a cada superficie y costado, el barco pronto empieza a elevarse y todos se toman de algún lugar para no terminar tirados en el suelo, mis alas rebosan y el polvillo es protegido en mi pecho, prosigo tomandolo y esparciendolo a fin de que Estribor allá sido completamente rellenado en ello.

— realmente parece un hada —fruncí mi ceño en cuanto escuche las palabras de Charles, pero tampoco pude evitar una sonrisita.

— cinco segundos para el impacto —la voz de Harry me hizo darme cuenta de lo cerca que estaba el agua de la esquina del barco, tuve que ser muy rápida y acarició la punta del barco con el polvillo en mano y alejarme rápidamente, mientras veía como el agua empezaba a tornarse arcoiris y el barco a iluminarse aún más con el contacto del polvillo.

El agua se estaba acercando a mi y descendí a gran velocidad para sostenerme de algo.

— manténganse así hasta que el barco esté por completo al otro lado —la voz de Peyton nos estaba advirtiendo.

Pero la voz de Tristán me hizo caminar hacia él— Meido, toma mi mano, mantente cerca —asentí ante su llamado y corrí al cercano Tristán, meintras veía como Diaval protegía con sus alas a Andy.

Podrías hacer eso.

El agua empezó a llegar a nosotros, la cascada ya estaba aquí, Ryan a mi lado se protegía la cabeza lo más que podía, alce mis alas— Ryan acercate —y con el poco tiempo que me quedaba puse mis alas sobre los tres, los chicos con cada uno al lado estábamos en completa oscuridad.

Mis ojos eran los únicos que nos proporcionaban un poco de luz verde y la mirada de Ryan me miraba con el ceño fruncido, estaba demasiado cerca— si te soy sincero —trago y parpadeo— sino me avisas que harías esto y de un momento a otro estoy aquí —parpadeo— te hubiera golpeado la cara —lo mire con recelo, el agua estaba cayendo sobre mis alas, pero un poco de ella se había desviado al pobre de Ryan, que raro ¿no?— debí haber dejado mi boca cerrada —volví mi mirada a un punto ciego.

Pero de un momento a otro el barco se empezó a sacudir, fruncí mi ceño en cuanto Tristán se alejo de mi protección y Ryan también, aún agarrados de un sostén del barco, no podía evitar moverse en su mismo sitio, pero desafortunadamente para mí, no fue tan bueno, porque al no estar aferrada a algo, yo sí caí el vacío, la sangre se me subió a la cabeza en cuanto vi que atravesaba el costado del barco y caía al aire puro, el barco se estaba alejando de mí y pronto me di cuenta el por que del polvillo, el barco se estaba zarandeando, mi mirada fue entonces a la isla que se hallaba a unas cuantas olas más, fruncí mi ceño, ¿acaso eso era Nunca Jamás?

Pero lo que me alerto aún más fue ver un pequeño destello amarillo venir con rapidez al barco, deje de caer en ese momento y alce en vuelo mis alas, para impulsarme y poder llegar nuevamente al barco que ahora estaba presentando turbulencias.

Y el polvillo que estaba acercándose al barco no era nada alentador.

Descendientes - Salvemos al País de Nunca JamásDonde viven las historias. Descúbrelo ahora