Descendientes - El plan de los villanos

72 10 0
                                    

—LA PRINCESA VALIENTE XXVI—

PERSONA OMNISCIENTE

— Peter, Peter —la melodiosa voz de Hook se escuchaba en la cabina, mientras Pan se hallaba preso entre cuerdas— Peter, Pan —pronunció con gracia Hook, embelesado en su vista con su presa.

Pues era bien sabido que durante años y décadas, Hook se mantuvo prisionero en la isla, por culpa de Peter Pan, años antes de meterlo en esa isla apestosa, Hook se agraciada de tomar todo el botín que fuera posible, pues de eso se trataba ser un pirata.

Pero, su mayor reto por mucho tiempo, siempre fue Peter, Peter Pan y ahora, tenerlo cerca y verlo amarrado e indefenso frente a él, le daba demasiado placer.

Mientras que en la misma habitación, Gothel y Úrsula deambulaban en espera de HeavyRain quién había ido en busca de algún indicio de cómo se estaban manejando las cosas en las tierras.

Y en lo que eso sucedía, Hook no dejaba de mirar con diversión al pobre Peter Pan, atrapado frente a él, con su ceño fruncido y su labio partido, con el sudor en todo su esplendor y su pecho agitado. Peter había visto a su amigo ser apresado junto con otro indios más y ser llevado a lo bajó del barco, bajo custodia total de tripulantes pescados, seres creados por Úrsula.

Hook pasó su garfio en la barbilla de Pan y sonrió con sus ojos bien abiertos, deleitándose con el miedo en ellos, aunque ciertamente Peter no sentía miedo— el niño que jamás envejecía —masculló con deleite, pero entonces quitó su garfio con desdén— qué mentira más grande, eres viejo —entonces se separó de Peter y se sentó frente a la silla de él— pero, cuéntame, Peter, hace mucho que no estoy en Nunca Jamás —cruzó así piernas y sonrió a gusto.

Pero Peter escupió a un lado y grupo diciendo— no debiste haber vuelto —

Hook hizo un ademán y respondió— me han contado que tienes familia —ignorando por completo lo que en un momento Pan había dicho, entonces se retractó y pensó en ellos.

Indefinidamente y durante este tiempo, Pan solo pensaba en su familia, en Peyton, en su amada Moira y su pequeña Maggie, si tan solo pudiera volar lejos o si Tinkerbell estuviera ahí, sería diferente.

Pero ahora era solo un hombre de gran edad.

— eso no te importa Garfio —pero aún así él no pensaba decirle nada a Hook.

— oh, tranquilo, no pienso meterme en asuntos familiares —Hook le resto importancia, pero su bigote se removio— pienso reunirlos para que hablen entre ustedes —las botas del pirata resonaron en el suelo y provocaron la mirada de las mujeres presentes— y me veré en la amabilidad de reunirlos, ya que tú estás —una mirada furtiva— indispuesto, los traere aquí —no era necesario medir el grado de furia que Peter ahora mismo estaba experimentando, pensado en lo que pasaría si él estuviera libre y si ese tonto pirata se stevia a hablar así de su familia con él sin ataduras— solo dime, Peter —pero de un momento a otro, Hook se acercó amenazante a Peter— ¿Dónde está tu familia? —

Pan gruño con odio— eso jamás te lo diré —escupió hacía el capitán, quien cerró sus ojos con molestia y dirigió su mano a su bolsillo para sacar un pañuelo y alejarse de Pan mientras limpiaba su rostro.

— aún con años y años, sigues siendo el mismo niño bastardo —y cuando menos lo pensó, una cachetada de parte de Hook había aparecido en el rostro del pobre Pan, su mejilla pronto se tornó rojiza, pero aún con eso, él no pretendía revelar la ubicación de su familia.

Aunque, pronto no sería necesario. Me temía que no.

Fueron minutos en que la puerta de la cabina se vio abierta de par en par y una chica de aspecto peculiar entró por ella y cerró la puerta bufando y arreglando su cabello a medida que las miradas se posaban en ella.

Descendientes - Salvemos al País de Nunca JamásDonde viven las historias. Descúbrelo ahora