No debí confiar en ti [EN EDICIÓN]

Capitulo 78

Eran casi las nueve de la noche y Cole tocaba la puerta del departamento de su hermana junto a Haley.

Ambos estaban realmente cansados, ni siquiera habían comido algo. Cole había comprado todas las cosas esenciales para la casa y pronto llegaría un camión con sus cosas desde Los Ángeles.

- Ya llegaron - habló Camila en un tono bajo - pasen - se hizo a un lado para que pasaran al interior del departamento.

Cole y Haley entraron y pudieron ver cómo Lili caminaba por el departamento con Adeline en sus brazos completamente dormida mientras Lili daba pequeños golpecitos en su espalda.

-Adeline estuvo todo el día con ella, no se separó ni un segundo - soltó Camila poniéndose a un lado de Cole.

Este asintió y camino hasta Lili para mirarla y tomar a la niña rozando sus manos con las de la rubia.

- ¿Podemos hablar? - preguntó Lili en un tono bajo mirándolo a los ojos.

- ¿Sobre? - preguntó acomodando a la niña en sus brazos para no despertarla. Lili guardó silencio bajando la mirada. Cole pareció entender de que quería hablar la rubia - está bien, espera un segundo.

Lili levantó la vista con una pequeña sonrisa viendo cómo Cole le daba la niña a Haley mientras le decía algo que no alcanzaba a escuchar. Vio cómo Haley asintió mirándolo para luego despedirse con una sonrisa y un movimiento de manos saliendo del departamento.

- ¿Hablamos afuera? - preguntó Cole señalando el balcón.

Lili asintio para comenzar a caminar hasta el balcón seguida de Cole.

- Bien, dime - hablo mirándola mientras metía sus manos en los bolsillos de su pantalón.

- Esto es difícil para mi - admitió cruzándose de brazos por el frío que había comenzado a sentir culpa del viento que golpeaba contra su cuerpo. -se que tú rehiciste tu vida y ahora tienes una hija preciosa, pero... necesito decirte esto. No te pido nada, solo quiero que dejes de sentir ese odio hacia mi.

- No te odio - negó mirándola.

- Ambos sabemos que si lo haces, tienes cierto rencor hacia mi y no quiero que lo sigas sintiendo. -tomó una bocanada de aire aún abrazándose así misma - Puede que lo que te voy a decir no cambie las cosas entre nosotros, pero enserio espero que por lo menos puedas hablarme o tan solo mirarme sin sentir asco y pensar que soy una mala persona.

- No siento asco ni mucho menos pienso que eres una mala persona. Solo... la cosas terminaron mal entre nosotros - se encogió de hombros mirándola.

- Yo no te engañe - soltó.

Cole asintió. - está bien.

- ¿Que? - preguntó la rubia confundida ante la respuesta del chico.

- Que está bien. Si me engañaste por algo será y si no lo hiciste... no se que quieres que te diga - negó sentándose en una de las sillas de la pequeña mesa en el balcón. - Y no quiero sonar mal, pero como ya te había dicho, Adeline es lo único que me importa.

Lili lo imitó. - lo se, lo entiendo. Pero no digas nada, solo escúchame - pidió mirándolo.

Cole asintió sin emitir sonido alguno. Lili tomó aire y comenzó. - ese día yo fui a la pizzería que solíamos ir siempre. Cuando estaba esperando mi orden, Bree se sentó junto a mi - Cole frunció el ceño abriendo la boca para hablar pero la rubia no se lo permitió. - espera, ella se hizo pasar por una tal Annabelle Jones, y luego llegó Bret y me pido que habláramos porque quería disculparse por haber intentado abusar de mi cuando teníamos diecisiete. Yo salí a hablar con él afuera de la pizzería mientras Bret le echaba un polvo blanco a mi bebida. Cuando entre esta se fue y yo seguí en lo mío. Luego ellos me subieron a su auto y junto a Donna y Joan, me llevaron al departamento donde a las horas desperté con Bret junto a mi y tú viendo todo - soltó con sus ojos cristalizados.