Capitulo 42

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Ni siquiera "te amo" dijo, y aunque pareciera estupido ya que solo son dos palabras, para Lili era importante.

- Lili, mírame... - Madelaine habló casi en un susurro. Tomó las mejillas de la rubia para que la mirara a la cara. Vio los ojos rojos y las lágrimas que caían de ellos, sintiendo una presión en el pecho. - Todo está bien, no se cual habrá sido la razón por la que te mintió, pero dudo mucho que sea por una infidelidad, él te ama.

Lili negó con la cabeza. - no, no lo hace - hablo con su voz quebrada mientras lágrimas seguían saliendo de sus ojos. - si él me amara no me engañaría.

- Y no lo hace, yo sé que él no seria capaz - negó. Ella confiaba en que Cole jamás haría eso, ni a Lili ni a nadie.

- No puedes estar segura... - murmuró negando. - Madelaine piensa, no hay que ser muy inteligente para darse cuenta de lo que está pensado - Apretó sus ojos con fuerza. Lágrimas seguían saliendo de ellos. - Últimamente ha pasado mucho tiempo con ella, además me miente - la miro. - Quizás cuantas veces me ha dicho que está en su casa y en realidad está con Allison.

Madelaine negó. - No, yo se que él no te está engañando Lili - lo defendió. - A él lo engañaron. Por Dios el no haría lo mismo.

- ¡Deja de defenderlo! - exclamó alzando la voz. - enserio basta - volteó para mirar al frente. - Casi siete meses a la basura. Si quería empezar a salir con Allison por lo menos me lo hubiera dicho, hubiésemos terminado. No era necesario engañarme - volteó a mirarla. - ¿Tan poco le importo?.

Madelaine sintió cómo una lágrima corría por su mejilla, y la limpió rápidamente. - Necesito que dejes de lado ese pensamiento de que te engaña. Yo se que él no sería capaz, he escuchado como el habla de ti y te juro que nunca antes había hablado así de alguien. Yo he visto cómo sus ojos se iluminan cuando te ve, yo se que él te ama - afirmó con una sonrisa melancólica.

- Llévame a mi casa por favor - hablo sin ninguna expresión en su rostro. Madelaine abrió la boca para hablar pero Lili no se lo permitió. - No digas nada.

La pelirroja suspiró y comenzó a manejar hasta la casa de la rubia. Por otro lado, Cole guardaba su celular en su bolsillo luego de cortar la llamada.

- Así que en tu casa - hablo divertida.

Cole hizo una mueca y se volvió a sentar en la cama. - No le digas que estaba aquí - pidió.

Allison suspiró y lo miro seria. - ¿Por qué le mientes?.

- No lo se, pero es la primera vez que lo hago... creo - dijo rascándose la nuca. - No se porque lo hice. Ella sabe que fui al cine contigo y que somos amigos.

- Disculpa que te lo diga pero fuiste un estupido - lo miro seria. - ¿¡por qué diablos le mientes!?.

- Si le hubiese dicho que estaba aquí, estoy seguro que se hubiera puesto celosa y prefiero que se evite el mal rato.

Allison lo miro e hizo una mueca para reír negando. - Me la imagino como ese tipo de novias muy celosas hasta un poco locas, por supuesto tóxicas, que te revisan el celular y es capaz de seguirte para saber si le eres infiel - hablo divertida.

Cole soltó una carcajada por lo que su amiga había dicho. Lo que el no sabía es que Lili ya estaba llegando a ese extremo. - No, ella no es así - rio.

- Lo se, es broma - afirmó divertida.

(...)

Cole llega a su casa luego de cenar con las Miller. Estacionó su auto en el garage junto al de su hermano. Camino hasta el interior de la casa, colgó sus llaves a un lado de la puerta y comenzó a caminar hasta la sala.

No debí confiar en ti [EN EDICIÓN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora