Historias De Un Personaje Secundario

Capitulo 11: Sam y Ashton: Los mejores amigos (+Charlie como colada)

¿Nunca les pasó que sienten que su vida va cuesta arriba? ¿Que todo va tan bien que se están acercando al cielo? ¿Tan cerca de llegar al destino que los espera, y que nadie puede bajarlos?

Pues así me había estado sintiendo estas últimas 2 semanas, desde la fiesta de Halloween. Tengo un novio perfecto que me quiere y me trata bien, amigos asombrosos y nuevos conocidos populares que siempre me saludan cuando me ven, y en las clases sigo manteniendo mi buen promedio.

El universo me sonreía, y yo no podía evitar devolverle la sonrisa.

—Y luego me dijo que Amanda, otra de las porristas, había invitado a salir a Carlos, luego de estar enamorada de él hace años y...— Interrumpí la historia que Ana me había contado, cuando note que Sam miraba fijamente su plato con comida de la cafetería, sin prestarme mucha atención. —¿Sam, me estás escuchando?

No respondió.

—¿Samantha? —Chasqueé mis dedos frente a sus ojos, sobresaltándola.

—¿Qué? ¿Qué pasó con la porrista? —Reí al ver su cara anonadada.

—¿No es muy temprano para andar soñando despierta? Guárdalo para la noche.

—Lo siento, solo tenía la cabeza en otro lado. — La alenté a que siguiera. —Me sigo sintiendo muy mal por lo de Lucas, tú no lo viste cuando me habló el otro día, se veía tan decepcionado.

Oh sí, el único drama que tenía mi atención por el momento.

El lunes luego de la fiesta, Lucas había buscado a Sam para hablarle, y aunque no parecía enojado, le dijo lo mal que se había sentido cuando lo dejo plantado en la fiesta y que lo mejor era quedar solo como amigos. La cara de tristeza del basquetbolista y su poca energía no se me paso desapercibida en todo el día.

Pobre, el cliché no estuvo a su favor.

—Todo lo que paso fue muy complicado, quedar como amigos fue lo mejor. Tú lo dejaste solo en la fiesta, él no iba a esperarte toda la vida. —Esa última parte me sonó demasiado acusatoria. —Lo siento.

—Es que no entiendes como fue la situación, Charlie. Nos pusimos a hablar y los minutos se volvieron horas, y de repente era medianoche y finalmente llegaron a ayudarnos. Fue algo tan extraño. —La manera en la que sus ojos se iluminaban al hablar de Hunter fue sorprendente. —Fue la primera vez que hable más de 2 minutos con él, sin peleas ni insultos, y me di cuenta que quizá no es quien parece ser. Es más profundo, detrás de su actitud molesta y de vicio, hay alguien que solo necesita ayuda para mejorar.

Ah mi momento favorito de la historia: El acercamiento.

Resulta que, como siempre, mis hipótesis habían estado acertadas, y Hunter, ''Bad Boy Supremo'', Brooks, era un chico con el corazón roto, uno a quien posiblemente no le gustaba la persona que era, y que solo hacía lo que hacía como método de defensa, específicamente de defensa por su complicada vida familiar.

Al quedar atrapados en el cobertizo, al parecer habían logrado conectar sobre sus familias, algo relacionado con las grandes expectativas y la manera en la que los trataban sus padres; y estas semanas, habían estado muchísimo más cercanos que antes. Ya no se insultaban, y aunque yo parecía ser la única que las notaba, las miradas que había entre ellos en el recreo habían aumentado. Era como ver una película romántica en una pantalla grande, solo le faltaba la música de fondo y ya sería una escena calcada de ''Diez Razones para Odiarte''.

Aunque Lucas me daba mucha pena, sabía que lo suyo con Sam no iba a ser posible, y me alegraba un poco que el cliché estuviera avanzando tan bien. El ''Felices para siempre'' de mi amiga se acercaba cada vez más.