Historias De Un Personaje Secundario

Capitulo 22: Los bad boys son dramaticos

—Bonito lugar. —Anuncié al llegar. Hunter me miró desde la mesa.

—Bueno, la biblioteca está cerrada, así que creí el parque sería la mejor opción.

Observé mi alrededor. Estábamos en un parque cerca de la escuela, rodeados de árboles teñidos de blanco y senderos por donde personas corrían o paseaban a sus perros. A unos metros de nosotros, se escuchaban los gritos de felicidad de unos niños que jugaban en columpios y a la pelota.

Me senté frente al chico, dejando mi mochila a un lado y sacando mi edición de Mujercitas

—Bien, ¿En qué habíamos quedado la otra vez? —Pregunté, hojeando algunas de las muchas cosas que tenía marcadas.

—Si no estoy mal, elegimos hacer escenas de Mujercitas— Comenzó —Y luego nos pusimos a discutir si es mejor marcar los libros con post-its o escribir y rayarlos.

—Yo aún no puedo creer que nunca hiciste una anotación en un libro que te gustaba. —Negué, incrédula —¿Ni siquiera unos corazoncitos a los costados de algo bonito?

—Prefiero marcarlos con algo removible. —Se alzó de hombros. —Encuentro mejor escribir mis pensamientos en una hoja de papel aparte.

—Oh, claro, porque no te gusta que la gente a quien le prestas tus libros sepa tu opinión, ya entendí. —Concluí con una risa. —Debería cambiar tu contacto de ''Señor Buen Gusto'' a ''Señor Chico Misterioso'' ¿No crees?

—Yo no presto mis libros.

—Me retracto. Debería empezar a decirte ''Señor Egoísta''

Él rodó los ojos, y me fue fácil darme cuenta de que hoy no se encontraba con ese humor tan relajado que había manifestado el otro día. Recé mentalmente que su cara larga no hiciera esta reunión complicada.

—¿Podemos empezar con el trabajo? —Preguntó —Quiero terminarlo a tiempo.

—Tenemos como un mes para hacerlo. —Me quité el pelo de la cara. —La profesora Collins es muy buena con las fechas de entrega.

—Que tu favoritismo no te haga una aliada de esta estupidez.

—De algún lado saqué mi inspiración para ser profesora de literatura, y esto no me parece una estupidez. —Acoté. Él solo volvió a bufar.

—¿Empezamos?

—Estuve pensando, ¿Lo haremos de las dos partes, no? ¿Tanto de Mujercitas como Aquellas Mujercitas? —Asintió. —Bien, entonces creo que sería bueno hacer cuatro escenas, dos y dos.

—¿Tantas?

—Nos ayuda a mantener una continuidad que creo que es importante. Aquellas Mujercitas no funciona sin la primera parte. Debemos presentar un poco del contexto de la familia para que se entiendan las decisiones que toman en la adultez. — Expliqué. —Además, podríamos utilizar los paralelismos que ya existen entre varios capítulos.

—Ok, me gusta— Me quito el libro de las manos —Wow Lottie, solo la primera página y ya está todo escrito, no bromeabas sobre que te gustaba marcarlos.

—Hay anotaciones de mi yo de seis años hasta de la última vez que lo leí. —Me alcé de hombros, quitándoselo de vuelta. —¿Y en serio sigues con lo de Lottie?

—Es más original que "Charlie"

—Si ignoras que es una copia a Louisa May Alcott. —Me reí, mientras abría el libro en una de las páginas que tenía marcadas. —Marqué varias páginas que se me ocurrieron para hacer, hay algunas de las 4 hermanas que creo que nos pueden servir para lo del contexto; tengo unas de Beth, y... Lo siento, parece como si estuviera haciendo todo el trabajo yo, ¿Qué capítulos te gustaría hacer a ti?