Historias De Un Personaje Secundario

Capítulo 51: The Promposal (fuegos artificiales y musiquita epica)

Si hay algo que me agobia bastante (entre otros) es la época de fin del año escolar. No solo porque están los exámenes más difíciles del año, los trabajos finales y las preparaciones para las fiestas de la escuela. Si no porque todos los años, —más que nada este, mi último año en la escuela —, había un acontecimiento que despertaba mi ansiedad y no me dejaba pasar el último mes de clases tranquila.

Un acontecimiento que, aunque solo duraba una noche, tenía una preparación previa agotadora y demasiado glorificada por la media.

Faltaban 3 semanas para el Baile de graduación, y la gente estaba desesperada por conseguir citas.

Estábamos en la Semana De Invitación o como le dicen en las pelis de adolescentes "La semana Promposal"

—¿Y si le compro confeti y lo hago explotar en su casillero? —Me preguntó Lilith, fruncí el ceño.

—¿Eso no sería un tanto... Agresivo? —Cuestioné, jugando con uno de mis anillos —Además, sabes que no le gusta que le queden cosas en el cabello.

La rubia bufa, dejando de caminar.

—Mierda, tienes razón. —Dijo —¿Y si le digo a las chicas del equipo que me ayuden a armar una coreografía y se lo pido en el partido del viernes?

Volví a negar.

—¿No eso lo va a hacer Gwen para invitar a Andrew?

Las gradas temblaron con el pisotón que dio.

—¡Mierda! ¡Ya no tengo más ideas! —Se desplomó a mi lado —¿Tan difícil es querer hacerle una bonita invitación al baile a tu novia?

—¿Y no puedes solo ir y preguntarle? —Cuestioné —Es tu novia, es obvio que te dirá que sí.

—Eso no es divertido Charlie, la idea es que sea algo hermoso, que recuerde para siempre. —Suspiró con ensoñación —Todos dicen que esta es la etapa que más recordaremos de nuestras vidas, quiero que esto sea lo que se destaque.

"La época que más recordaremos en nuestra vida" Tristemente estaba casi segura que de todo este año, estas semanas eran las que menos recordaré.

Sobre todo por el hecho de que no tenía a nadie para invitarme o invitar al baile, así que tendría solo el rol de observadora toda la semana.

—No puedo creer que nos vayamos a graduar, Charlie, ¿Puedes creerlo?— Siguió, alejándose del tema de su novia.

Y a decir verdad, no, no podía creerlo.

Siempre había sido una persona que estimaba su futuro con mucha ansia. Desde los 13 tenía todo planificado a la perfección. Desde mi último año, la graduación, hasta cómo sería mi vida universitaria, mi trabajo y si formaría una familia o no.

No había errores, ni cambios. Todo 100% planificado.

Pero en todo ese plan Durham era parte crucial, Durham era parte crucial de absolutamente toda mi vida. No es lo mismo que anuncien "Charlotte Jackson, graduada con honores con una beca a la Universidad de Durham" que "Charlotte Jackson."

Y si también le agregamos la disolución de mi grupo de amigos, la perdida de la que siempre creí que sería la madrina de mi primer hijo y mi falta de una cita para el baile, este último año tampoco se veía muy lindo en mi registro.

Así que claramente no podía creer que iba a graduarme, no después de que todos mis planes se habían desmoronado.

—El año paso volando, eh.— Fue lo único que dije, sin embargo, Lilith no tenía por qué saber mis destrozos emocionales.