Muriendo por realidades

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Q U I N N

Hablando de engaños... — la voz de mi padre se oye — Deja de pensar con superioridad cuando estás sola en esta guerra.

Mis ojos buscan a mi padre y en el camino veo a Oliver tratando de ponerse de pie. Mi padre aparece en mi radar de visión y lo toma por el cuello del chaleco acercándolo a su cara — sal y dile a Andrey, que para que deje a su familia en paz, debe dejar de meterse con la mía, también — me mira — Yo me quedaré con mi hija, Noor, también pasará unas vacaciones con nosotros ¿Que te parece hija?

Le doy una patada a Jack y me libero — Me parece una mierda, Mattia — digo cuando veo a los hombres llevándose a Oliver, quien apenas puede articular algo. Siento la respiración de Oliver en el auricular y la comunicación parece cortada, porque no hay señales de nadie.

— Ah, Oliver, dile al boss, que a esta batalla la gané yo. Pero que la guerra continúa.

Lo veo desaparecer y siento como me barren los pies llevándome al piso. La cabeza me golpea con una piedra y la costilla se me clava en un escalón.

Siento que me falta el aire, y así es, me
Empiezo a asfixiar hasta que veo todo negro... Dejo de escuchar, siento cierta paz y unas cortinas que me susurran que me deje descansar. Dejo de intentar que mis pulmones encuentren oxígeno y paro.

En ese momento de ilusiones, me di cuenta que también me estaba muriendo de realidades. En un vacío y mundo de crueldad.

RAMÉDonde viven las historias. Descúbrelo ahora