#16-💜Has lo que nunca harías💜

104 28 42
                                    

—Esto no es lo que yo quería, ¿Acaso no entiendes? Tu corazón pertenece a alguien más, ¡Yo sólo quiero que me pertenezca a mí! —dijo viéndome con una mirada vacía, incluso pude sentir un escalofrío recorrer todo mi cuerpo.

—¿Y cómo se supone que haga eso? ¿Tengo que dejar a Rose para correr a tus brazos? —dije y reí.

—Tal vez... —fue lo último que dijo y se retiró de la habitación.

JADE

No sabía que estaba pasándo conmigo, me sentía débil y malhumorada, apesar de que dormí bien, me sentía muy cansada. Fui a la habitación y luego al baño, tomé una ducha de agua a temperatura ambiente, salí, saqué mi cuerpo y cabello, para luego ponerme el uniforme.

Salí luego de peinarme y fui a la cocina, tomé cereal con leche y empecé a desayunar, Eduard no tardó en salir de su habitación ya listo, para al igual que yo tomar algo de cereal...Había un silencio incómodo entre ambos, sólo sentía su mirada sobre mi de vez en cuando, pero prefería ignorarlo.

Luego de desayunar subimos al auto en dirección a la escuela, aún sin mencionar una sola palabra, llegamos y bajé del auto, pero esta vez Eduard rompió el silencio.

—Vendré por tí para ir a almorzar a un restaurante, así que espérame y ten un buen día —dijo y yo sólo me limité a asentir.

Eduard se fue y yo entré al colegio, encontrándome con Edwin en el pasillo de nuestros casilleros.

—Hola —dijo sonriendome—. Se nota que alguien no durmió bien —dijo ahora riéndo.

—Amigo, no te rías o te golpeare —dije mostrándole mi pequeño puño.

—Está bien, mi pequeño Angel —dijo remarcando la palabra "angel".

—¿A-angel? —pregunté y éste sólo me guiñó un ojo.

—Tu secreto está a salvo conmigo, lo prometo —dijo llevándo su meñique hacia mí.

—Es una promesa —dije y entrelace mi meñique con el suyo.

¿Cómo Edwin se había enterado tan rápido? ¿Recordará algo? o era muy inteligente o sólo muy inocente, no lo sé, pero al menos alguien me creía.

Fuimos al salón de clases, hoy tocaba la materia de Inglés, algo que no se me dificultaba para nada.

[...]

Pasaron las horas hasta que por fin sonó la campana de salida, tomé mis cosas y al igual que mis compañeros salí del salón dirigiéndome hacia la salida del instituto.

—¿Te irás tan rápido? —preguntó Iseul una vez estando afuera.

—Si, iré a almorzar con un amigo —dije y él asintió.

—Entiendo, si no te molesta, me gustaría invitarte al cine hoy en la tarde, después de hacer el trabajo de Inglés —dijo llevándo una mano a su cuello, seguro estaba nervioso.

—Oh, me encantaría Iseul —dije y le sonreí, acto que él siguió.

—Bien, te enviaré un mensaje y me dices la dirección para pasar por tí —dijo entregándome su celular, escribí mí número y se lo devolví—. Ah y esto es para tí.

—Está bien, gracias, nos vemos Iseul —agite mi mano despidiendome de él, para ir en la dirección donde se encontraba Eduard espiandonos.

𝑺𝑰𝑴𝑷𝑳𝑬 𝑴𝑨𝑮𝑰𝑨 𝑰Donde viven las historias. Descúbrelo ahora