Capítulo 63

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Mientras pensaba, el cansancio de los últimos días lo invadió repentinamente. Se frotó las sienes ligeramente.

—Deberías descansar— La voz de Jungkook irrumpió sus pensamientos.

—Está bien —Mientras hablaba, se sentó en la cama, se quitó las botas y se recostó. Usó un codo para apoyarse —Jungkook, tú también deberías...— Dejó de hablar al notar que lo que había dicho era algo un poco incómodo.

Había una sola cama en la habitación. Si Jungkook, al igual que él, también descansaba, tendría que dormir en la misma cama que él. A pesar de la cantidad de veces que habían dormido en la misma cama en los últimos días, después de las viles palabras que expresó Yoongi en el Hall ancestral del Embarcadero del Loto, las cosas entre Jungkook y Seokjin se habían vuelto algo extrañas, al punto que empezó a hacerse más consciente de algunas acciones a las que antes no les había prestado mayor atención. Gracias a eso, ahora, ¡Ni hablar de compartir una cama con él! Tan sólo un rato atrás, la pregunta de cuántas habitaciones pedir para pasar la noche, hizo que la mente de Seokjin se hiciera un embrollo.

—No es necesario.

Levantándose un poco, Seokjin comentó—Eso no está bien. Estos últimos días, tú también has estado...— No pudo continuar. Apenas dijo eso se arrepintió inmediatamente. La incomodidad, de nuevo, le trabó la lengua. ¿Y si, después de escuchar esto, Jungkook decidía que compartir una cama era demasiado problemático y que era mejor pedir dos habitaciones? ¿No sería eso aún más incómodo?

Jungkook dijo —No lo necesito. Tú eres quien debe descansar.

Tocando su barbilla, Seokjin respondió —...Oh. Entonces descansaré un rato, despiértame a las tres.

Viendo cómo Jungkook, sentado meticulosamente junto a la mesa, cerraba los ojos y comenzaba a meditar, Seokjin se recostó de nuevo en la cama.

Usando un brazo como almohada, Seokjin miró fijamente el techo durante un rato antes de girarse a un lado, dándole la espalda a Jungkook. Después de algún tiempo más, seguía sin poder quedarse dormido. Sus ojos estaban bien abiertos y en alerta. No pudo evitar sentir inquietud y ansiedad.

Antes, cuando pretendía estar fuera de sus cabales, había insistido en que sólo podía dormir cuando estaba al lado de Jungkook. Por supuesto, todo eso era una vil mentira. Sin embargo, con el pasar de los días, esa mentira parecía haberse convertido lentamente en realidad. Seokjin no podía determinar en qué momento exacto eso había cambiado. Pensó, ¿Cómo puede ser posible? ¿En serio no podré dormir nunca más sin Jungkook a mi lado?

Después de dar vueltas y vueltas durante bastante tiempo, Seokjin finalmente pudo cerrar los ojos y conciliar el sueño.

Cuando despertó, no estaba seguro de cuánto tiempo había pasado. Su visión estaba nublada y su mente, aturdida. Al mirar por la ventana, vio que la luz del día ya había desaparecido. Eran pasadas las cinco.

Seokjin se sentó al instante. Un ruido vino detrás de él. Dándose la vuelta, vio que Jungkook acababa de cerrar un libro.

—Jungkook, ¿por qué no me despertaste? ¿No acordamos que me levantarías a las tres?

—Tu mente y tu cuerpo deben recuperarse completamente. Podemos permitirnos una hora o dos más.

Seokjin había estado durmiendo por casi medio día. En todo ese tiempo, era probable que lo único que Jungkook había hecho fuera bajar y traer consigo un libro para leer. Se sintió un poco apenado, así que saltó de la cama y dijo —Mis disculpas. Realmente dormí demasiado. Tú también deberías recostarte un rato.

—No es necesario.

En ese momento, alguien llamó a la puerta. La voz de la dueña vino de afuera —Jóvenes Amos, he traído la cena.

Cultivación Demoníaca - KookJinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora