Capítulo 54

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Pov. Narradora

Luego de haber estado un día más en el hospital por observación y le entregaran las pocas pertenencias que tenían, se encontraba en casa, amaneciendo en su habitación con sus dos pequeños a su lado.

Con cuidado de no despertarlos se levantó y fue directo al baño para lavarse. Cepilló sus dientes, lavó su cara y peinó su cabello para amarrarlo con su liga negra.

Salió de la habitación y vio a su madre junto a Rosa en la cocina, charlando con una taza de café.

-Buenos días mamá - se acercó y le dio un beso - Buenos días Rosa - hizo lo mismo.

-Hola cariño - le dijo Mary.

-Querida buenos días - respondió la contraria - Al parecer quedaron profundos esos dos chiquillos.

-Sí, por lo inquietos que estuvieron anoche, no querían dormir - se sentó en la silla.

-Así son, hasta que se acostumbren a esta lugar - añadió su madre.

-Es verdad mamá, bueno me serviré café.

-Bueno mejor hagamos el desayuno - sugirió Rosa.

-Sí, después se levantan y se ponen exigentes.

-Antes de ir - tomó la mano de su hija lo que extrañó a Tn - ¿Cuándo piensas hablar con Jimin?

-Mamá - dijo en voz baja.

-Lamento meterme hija, pero ese hombre quiere verte, estuvo todo este tiempo buscándote como loco, casi enloquece de verdad, debes verlo.

-Y lo haré mamá, cuando quiera ver a Baek aceptaré gustosa, además debo decirle que necesita terapia mi hijo - bajó la mirada - No tengo cómo contactarlo así que si lo llega a hacer contigo dile que acepto por favor - jugó con sus manos un poco nerviosa - Bueno ahora sí hagamos el desayuno.

Se levantó y junto a Rosa que se reservó todo, dejó que entre madre e hija hablaran, ya después intervendria cuando fuera oportuno.

Se la pasaron charlando hasta tener listo su desayuno, en vista que no se levantaban aun esos dos pequeños, Tn fue a levantarlos. Los pequeños con sus caritas adormiladas se pusieron en marcha al comedor.

Luego de esa mañana tan tranquila, salieron a hacer las compras, los pequeños estaban entusiasmados, salieron brincando del departamento hacia el elevador que los llevaría al primer piso.

-Ya niños, demen la mano - las extendió y antes de tomarlas salieron corriendo, y ahí ven a una Tn corriendo detrás de sus hijos para que no vayan a la calle principal.

-Dios me van a matar - decía agitada tomándolos de la espalda.

Detrás habían risas de esas dos señoras que solo podían burlarse de ella, era primeriza por así decirlo, los tuvo muy seguidos y joven, así que no había experiencia alguna, era como estar en la misma etapa con los dos, y añadiendo que no tenían mucha experiencia del exterior, la tensaba más  a Tn.

-Mi pobre niña - dijo Mary.

-Tranquila Tn - ahora habló Rosa - No son tontos saben qué es peligroso.

-Es que igual, les puede pasar algo - se recompuso - ahora sí, vamos - anunció una vez que tomó sus manos.

Caminaron un poco, el departamento no estaba muy lejos de un centro comercial, al llegar fue un mundo nuevo para esos dos pequeños y ni hablar de las escaleras eléctricas, casi se ponen a llorar pero ahí va Tn, enseñándoles como subir.

Seré madre Donde viven las historias. Descúbrelo ahora