Seré madre

Capítulo 68

POV. Jimin

Una manos se andaban paseando por toda mi cara. Abrí mis ojos a la fuerza y lo quedé mirando. El pequeño se había sorprendido tanto que se alejó totalmente.

—No te asustes.

—Lo siento, no quise modetal.

—No molestas en lo absoluto, es muy bonito despertar contigo hijo —le sonreí pero mi sonrisa se fue en cuanto lo vi bajar la cabeza —¿qué pasa?

—Tu quieres mucho a mi hemano, lo tatas ben.

—Sí, lo quiero al igual que a ti —acaricié su cabellera.

—Tu me tatas ben, me dices mi amo, mi nino, hijo... —se quedo callado y no intervine — se siente bonito y no entendo lo que pasa poque cuando lo haces aquí se tiente dado—señaló su pecho.

—Es porque tu corazón se siente feliz, por eso.

—¿Es felicidad? —su rostro era taba asombrado.

—Por su puesto.

Se quedo callado por unos segundos, no dije nada porque sabía que el quería decirme algo, así que me mantuve en silencio.

—¿Yo...yo puedo llamate papá? —no pude evitar que mis ojos se llenarán de emoción, tenía que contenerme para no llorar.

Las emociones eran desbordantes, quería agarrarlo llenarlo de besos decirle al mundo lo feliz que era porque este pequeño me daba la dicha de ser su padre, algo que he anhelado tanto desde que supe de él y lo conocí. No podía yo hacer distinción para mi él siempre fue y será mi hijo de corazón.

—Claro que puedes —tomé su mano y se la besé.

—Gacias, mutas gacias.

Se me parte el alma, tan pequeño, tan inocente y agradecer por eso, sin duda es doloroso, qué no daría yo por haber estado con él desde el minuto cero de su vida, evitando todo daño, protegiéndolo en su totalidad, para que no sienta una soledad. Pero soy consciente, nada de eso es posible y lo que me queda ahora de trabajo, como su padre es hacerle saber que no tiene la necesidad de pedir amor, porque ya lo tiene.

—No agradezcas Bon-hwa, para mi, siempre has sido mi hijo y no sabes cuánto te agradezco el que decidas llamarme papá, te amo con todo mi ser, tú, tu hermano y tu madre son mi razón de vida.

Sin haberlo previsto, se me lanzó a los brazos y se puso a llorar.

—Papá, papá, papito —y repetía y repetía sin cansarse —te enconté.

—Tranquilo Bon-hwa, suéltalo todo, aquí estoy siempre estaré aquí mi amor —acaricié su espalada y besé su cabeza Aquí estoy.

Pov. Tn

Estaba con Baek en la cocina dándole un poco de fresa.

—Mami toma —me extendió una y yo la acepté.

—Qué rico mi amor gracias —besé su frente y nuevamente volví mi atención al celular para contestar unos mensajes.

Mi madre y Rosa habían llamado, Baek  fue el único que se despertó conjuntamente conmigo. Llamaron para avisar que ya iban a irse, de suerte Baek pudo despedirse de ellas.

—Ya se despertó la amiga más linda del mundo —giré mi cabeza para verla.

—Tía Sun —sonrió mi pequeño al verla.

—Uy, pero si este niño hermoso me saluda así no puedo evitar comerlo a besos —y lo hizo, haciendo que las risas de Baek se oyeran en toda la cocina.