For my blood, sweat and tears

IV

El ambiente quedó en ellos dos, Uraraka por su parte tenía un leve sonrojo por la sorpresa que se llevó, además de la posición de la que estaba.
Deku estaba con su sonrisa típica actual, sus ojos oscuros que no dejaba escapar nada a la contraída, una mirada que la atrapada inmediatamente sin salida.
—¿Que haces aquí? —volvió a repetir el pecoso más serio.

Esta vez Uraraka reaccionó— Tsk, sueltame —mando forcejeando, pero el agarre del peli verde era fuerte — ¡esyabas durmiendo, solo te iba a despetar!— mintió.

—Entraste hace por lo menos diez minutos. ¿Solo para despertarme?

—¿Estabas despierto?

—No.

—¿Entonces?

—Un quirk de sensor que se activó. Además aligeraste mi ropa, error. Agudice mis sentidos... Nunca puedo dormir tranquilo, siempre estoy alerta a todo. Aquí no me doy el lujo de descansar... Porque puede que alguien quiera entrar a sacar información... ¿No lo crees... Uraraka? Jaja..

—Tsk... Ya sueltame maldita sea.

—¿Que harás si no lo hago?

—Eri tiene el sueño ligero... Si also más mi voz ella se despertará... No creo que quieras seguir mintiendole... ¿No?

—Jejeeee si que sabes como jugar — sonrió — de todas formas no encontrarás nada de aquí.

—¿Como sabes que quiero conseguir algo?

—Te lo dijo Shigaraki... ¿No? Dijo.. Que no nos traiciones pero que busques información y viniste a eso más que a seguir mis órdenes... Y a mi ¿tengo razón?
La castaña se quedó callada con el ceño fruncido, era verdad.
—Jajaja de verdad amo siempre tener la razón... Fue por eso que no deje que Chrono los interrogará.

—¿Ah?

—Cosas mías —la soltó y se alejó —ahora dime el informe —cambió de tema.

Uraraka un tanto enojada se reincorporó su postura — Las ventas están bajando, el alto de precio puso agresivo a varios de los compradores, solo logramos sacar la misma cuota de antes, osea las ventas bajaron más de la mitad.

—Eso es bueno.

—Para usted...

—Vamos Uraraka, prácticaste como villana y héroe, tienes talento para lidiar con ese montón de gente que no sabe ocupar su quirk, por eso compran esas drogas. Pero no importa, solo será cosa de momento, la nesecidad hace que las personas consigan recursos por cualquier lado, es mejor eso que a te mandemos a ti y a Toga a robar los bancos, ¿no?

—Se aprovechan de la situación.

—Hay que vivir el momento, Uraraka. Ya debiste haber sentido esa sensación, ¿No? Esa donde no te importa los demás, jajaja claro que si la sentirste.

—Pero te estas aprovechando de los tuyos.

—¿Los míos? ¿Crees que esta gente de Yakuza me importa? Pfff. Solo son un montón de losers que no saben que hacer, de todas formas ya eran esclavos desde más antes. Yo solo vine a poner más órden a este lugar.

Uraraka ya no quería escuchar, de verdad esa nueva actitud le estresada, de verdad no era el mismo —¿ya puedo irme?

—Te voy a decir una sola cosa más— habló más serio mirándola a la cara— hay un subterráneo de este edificio... En ella una salida para poder escapar de aquí si en caso somos emboscados. Espero que te sirva esta información. Puedes retirarte.

—¿Ah?

—Retirarte.

—Dices puras estupideces— pensó la castaña mientras rodaba los ojos  se iba del lugar.