Entro al aula que compartía con su amigo, un aula en el que habían pasado demasiadas horas haciendo deberes o solo teniendo conversaciones casuales.
No había nadie.
Draco no podía ver a nadie, pero tenía una fuerte sensación en su pecho, sentía que debía encontrarse en este lugar. Se acercó a la mesa y se sentó en su lugar habitual.
Junto las manos sobre la mesa y cerró los ojos con fuerza.
- Lo siento – comenzó a hablarle a la nada – de verdad lo siento, no sabía cómo decírtelo, me lo conto mi padre pero... como decirte algo que te pondría tan triste, no parecía ser mi deber – la voz se le quebraba – tenia tanto miedo de que al saberlo fueras tras él...
Un gimoteo se escuchó en la estancia vacía, el cuerpo de Draco se tensó al escucharlo, se levantó bruscamente de la silla haciéndola caer en el acto, con paso decidido se acercó al lugar del que provenía ese ligero sonido y extendió la mano.
Sintió la suave tela sobre sus dedos y tiro de ella con mucha calma.
Harry se encontraba sentado en una esquina alejada de la estancia, estaba abrazado a sus rodillas con el mapa del merodeador a un lado y un álbum de fotos al otro.
En el álbum se repetía una imagen, era una boda, sin duda de los padres de Harry que sonreían a la cámara y le pedían a quien tomo la foto acercarse.
Un hombre apuesto de cabellos oscuros y largos vestido con un elegante traje se acercaba al novio para abrazarlo con fuerza y posteriormente darle un beso afectuoso en la mejilla a la novia.
Era Black, no se parecía en nada a la foto que habían publicado en El Profeta.
Harry lloraba en silencio, se había quitado las gafas y tenía la cabeza entre las rodillas. Draco puso las manos en sus hombros tratando de confortarlo.
Lentamente Harry fue alzando la mirada hasta encontrarse con la de Draco, Draco no podía respirar, santo cielo, los ojos de Harry eran la cosa más bella que debía existir en este jodido mundo.
Ahora, iluminados por las gruesas lagrimas los volvía más bellos, si era posible; al contener el llanto se había estado mordiendo los labios con fuerza dejándoselos rojos y húmedos.
La cabeza de Draco comenzó a dar vueltas, que diablos estaba pensando, no era el momento, en absoluto, pero no podía detener el curso de sus pensamientos.
Su cuerpo comenzó a moverse solo, las manos que había posado en los hombros de Harry se deslizaron hasta atrapar sus mejillas, le limpio las lágrimas con los pulgares mientras se inclinaba sin la fuerza para detenerse.
Poso un suave beso en los labios de su amigo. Solo un roce, fue tan breve, pero ambos chicos sintieron una ponente corriente eléctrica atravesando cada fibra de su cuerpo.
Las lágrimas de Harry se detuvieron, Draco se puso tan rojo parecía que estallaría en llamas en cualquier momento, aturdido quiso alejarse de semejante situación.
Antes de conseguirlo Harry tomo sus mangas y tiro de él hasta pegarlo a su cuerpo, Harry tenía las piernas abiertas y Draco estaba arrodillado entre ellas. Draco dejo de intentar huir, se dejó abrazar con mucha vergüenza.
Harry lo alejo un poco de su cuerpo para apoyar la frente contra la de su amigo.
- No cambia el hecho de que este enfadado contigo – le aseguro Harry – pero fue encantador.
Draco se sonrojo y le dio un golpe en el pecho.
- Si estas dispuesto – continuo Harry vacilante – podríamos posponer esto, creo que somos demasiado jóvenes para indagar en el romance.
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Padre
FanficUna decisión cambiaría el futuro de todos, Severus toma esta decisión, fue realmente duro al principio, pero con el tiempo sabrá que fue la mejor decisión de su vida.