... Sonrío aún contra el cristal, recuperándome, mientras que él sigue duchándose, de una vez, el agua ha estado corriendo más tiempo del que puedo contar.
— Bueno... seguramente ya habrán salido de la habitación, yo me voy
— Nos, estoy seguro de que volverás a entrar si no salgo.
Dice con certeza, apaga el grifo atándose una toalla mientras yo ya he abierto la puerta del baño viendo su lujosa habitación llena de maletas, maletas mías.
— Te vienes aquí.
— No, claro que no...
Se remueve el cabello con tranquilidad, mientras yo comienzo a irritarme por la decisión que ha tomado hacia mi persona, y como es que ha hecho que toquen mis cosas.
— ¿No se te ha ocurrido, que no querría?
— Claro, por eso he decidido traerla a tus espaldas, es temporal.
— Me da igual si es temporal, mis cosas no se pueden hurgar ni tocar, básicamente acabas de violar mi privacidad.
— No quiero que vuelva a suceder lo de esta mañana, es solo eso.
— ¡A la próxima me sabré defender!
— Allí está
— ¡En vez de trasladar mis cosas, deberíamos colaborar para sacar a Ronan del lugar en el que está!
— No empieces con eso, Riley.
— Nunca había cerrado el tema, ¿Acaso estás haciendo algo para ayudarlo?
— No, y tú tampoco harás nada.
Responde con simpleza
— ¿Por qué no?... habéis estado juntos, ¿no?, como novios, al estar con la misma chica, tal vez esposo, ¿habéis sido... Esposos?
— No hemos sido nada de lo que dices, cada uno quiere a la misma chica y en vez de destruirnos estamos con ella a la vez.
— Novios, por favor Callum, hay que sacarlo de allí.
— Te dijo que no te metieras y ayudarte sería claramente implicarte en algo que desconoces.
— Si me ayudas... me quedaré, lo juro, si no...
Me acercó a él a paso seguro
— Si no, ten por seguro que no volveré a hacer nada contigo, y ya ni hablemos de quedarme aquí, lo juro... yo cumplo lo que juro Callum... ¿Me ayudarás?
Se lo piensa, mucho tiempo no responde, así que comienzo a vestirme rápidamente, cojo mis maletas como puedo y me dirijo hacia la puerta
— Riley
Avisa, pero lo ignoro
— Riley detente
Abro la puerta dándome cuenta de que esta es la última vez que voy a ver a este tipo, porque con solo una sonrisa soy capaz de dejar que haga conmigo lo que quiera.
— Adi...
— Está bien, pero cierra esa maldita puerta, antes de que la selle.
Me destenso soltando una sonrisa de alivio, me doy la vuelta dando un portazo.
— Perfecto, pero, hay otro inquilino.
— No voy a meter a Otto en mi habitación
— Es...
— Ni a Harper, ni a Romy...
— Bien lo he entendido
— Puedes poner tus cosas en el vestidor.
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Lacronette
أدب المراهقينVerdades que duelen, secretos que matan. Una familia inusual, una institución convencional, dos muertos, más secretos, mentiras y escándalos. Bienvenidos a Lacronette.