IX

884 55 9
                                    


Halley se despidió de Harry y volvió a salir por la ventana, le daba miedo desaparecerse cerca del chico por si el Detector captaba su magia y el Ministerio pensaba que Harry seguía haciendo magia por su cuenta. Recorrió con prisa un par de las tranquilas calles de Privet Drive y cuando consideró que estaba a más de 1km de la casa se desapareció.

En el cuartel general había mucho movimiento por parte de todos, y el nerviosismo y la preocupación se palpaban en el ambiente.

-Halley, ven conmigo por favor- le pidió el profesor Dumbledore con calma. Esta le siguió hasta una habitación donde estaban sentados Oliver y Jake- los chicos me han puesto al día del funcionamiento de las libretas, y Jake me ha contado que las ideasteis en segundo para poder comunicaros en Hogwarts. En primer lugar felicitaros porque es una magia muy avanzada para alumnos tan pequeños. Pero quiero recordar que no tenías permitido acercarte a Harry este verano Halley- le recriminó mirándola por encima de las gafas de media luna.

-Lo siento profesor, tenía un mal presentimiento de que algo le podía ocurrir a Harry.

-Deberías haber tomado clases de Adivinación Halley, no te hubiera ido mal. Como vuestra misión en paralelo a la Orden nos ha traído beneficios, no tomare represalias chicos. El saber del ataque desde el minuto uno nos ha dado cierto margen de actuación y es probable que pueda evitar que Harry sea expulsado. Pero tengo que pediros que no obréis más por vuestra cuenta. Somos un equipo para todo, cualquier mal presentimiento que tengáis me lo comunicáis a mi directamente ¿está claro?

-Si señor- contestaron los tres con la cabeza gacha como si les hubiera pillado en una travesura.

La Orden comenzó a preparar un plan de rescate, la idea era hacer salir a los tíos de Harry la noche siguiente y aprovechar para sacarle de ahí. Era un plan que a priori no entrañaba mucho riesgo, siempre y cuando no se le escuchara a Ojoloco Moody. Bajo su punto de vista parecía que iban a ayudar a un preso de Azkaban a escaparse.

Estuvieron hasta pasada la una da la mañana discutiendo cada detalle del plan, hasta que acordaron que irían al rescate del joven Potter Moody, Tonks, Lupin, Oliver , Jake y Kingsley.

-Muchacho- le llamo Sirius a Oliver mientras recogían los pergaminos desperdigados en la mesa- ¿Por qué no os quedáis a dormir hoy aquí? Han sido unos días agotadores para ella- comento señalando a Halley que se había quedado dormida en la silla en una postura nada cómoda.

-Será lo mejor, sí.

Se acercó despacio a Halley y con mucho cuidado para no despertarla la tomó en brazos y con cuidado comenzó a subir las siniestras escaleras.

-¿Qué pasa?- preguntó ella con voz pastosa. Pero no hizo amago de querer bajarse de los fuertes brazos de Oliver.

-Nada princesa, sigue durmiendo-

Ella obediente, pasó los brazos alrededor del cuello de Oliver y se recostó cómodamente en el pecho de él. Al día siguiente cuando se despertara Halley recordaría vagamente a su chico quitarle la ropa con cuidado y ponerle una camiseta de él que usaba a modo de pijama y también recordaría como la arropó y le dio un tierno beso en la frente antes de acostarse a su lado.

Aquella tarde casi toda la Orden estaba reunida en la cocina de la casa Black, había mucha gente dispuesta a ir a rescatar a Harry asique se dividieron en varios grupos, estaban los que vigilarían el terreno y darían la señal de que era seguro salir, los que sobrevolarían la casa de los muggles y la retaguardia.

Tonks se había asegurado de que los tíos de Harry no estuvieran en casa aquella noche asique en cuanto estos estuvieron lo suficientemente lejos el pequeño grupo entró en la casa. No habían pasado dentro ni dos minutos cuando Tonks, curioseando, rompió un plato.

Mi verdadera obsesión.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora