EL SISTEMA DEL ORGULLOSO DEMONIO INMORTAL

FIN DEL CAPÍTULO XXIX

[¡+100 puntos de frescura por haber salvado el día!

¡-15 puntos de frescura por haber desenterrado un viejo trauma! >~<

¡+50 puntos de frescura por haber presentado ante todos a Su Xiyan!

Cargando...

¡+200 puntos B por completar la misión secundaria "El verdadero pasado de Shen Qingqiu!"

¡+250 puntos B por completar la misión secundaria "Destruyendo la máscara del Viejo Maestro del Palacio"!

¡+275 puntos B por desbloquear al personaje secreto "Su Xiyan" durante la misión secundaria "El verdadero pasado del Líder de Huan Hua"!

¡Felicidades! ¡Felicidades! ¡Felicidades!

¡Usuario, por favor continúe con sus esfuerzos para poder completar el objetivo de la misión "Un Shizun amable!"]

Fue durante su estancia en el Abismo Sin Fin que Luo Binghe descubrió como silenciar el odioso sonido de la campana de notificaciones así como la desagradable y horrible voz del Sistema cada vez que este intentaba alertarlo sobre algo. Sin embargo, no había encontrado alguna forma de deshabilitar por completo la molesta pantalla flotante de color azul que siempre aparecía ante él por lo que todavía tenía que lidiar con las constantes notificaciones que le decían cuantos puntos habían sido sumados o restados, las misiones principales y secundarias que había resuelto y cosas por el estilo.

Las alertas del Sistema se habrían vuelto bastante molestas justo ahora de no haber sido porque aprendió a ignorarlas por completo.

Mientras el tribunal estaba conmocionado y bastante impactado ante las confesiones inconscientes del Viejo Maestro del Palacio, Luo Binghe no pudo evitar girar la cabeza para ver a Shen Qingqiu.

¿Qué piensas de todo esto, Shizun? Este es el resultado de haber observado las cosas durante dos vidas.

En su vida pasada había tenido muchas oportunidades de saber la verdad acerca de la trágica historia de sus padres y el extraño comportamiento del anciano de Huan Hua para con él no era algo que hubiera pasado desapercibido ante sus ojos. Sin embargo había estado tan absorto dejándose llevar por sus fuertes sentimientos de venganza, odio, lujuria y poder cada vez más y más que –básicamente– jamás se había preocupado lo suficiente en investigar a fondo todo este asunto.

Y –gracias a los informes– en esta segunda vida sabía que el Viejo Maestro del Palacio le había permitido a Shen Qingqiu y a Liu Qingge entrar y salir bastante a menudo del Palacio Huan Hua con la excusa que eso le permitiría a ambos cultivadores poder investigar el extraño Amuleto que habían encontrado en en esa –ejem– interesante misión.

Había previsto de antemano que Shen Qingqiu pasaría por una situación como la que enfrentaba ahora ya que eso había sido justamente lo que sucedió en su primera vida –en la que su pasado al fin lo había alcanzado– y –sabiendo que era demasiado terco y orgulloso como para intentar probar su inocencia– Luo Binghe había decidido –esta vez– hacer algo al respecto.