𝗡𝗼 𝗺𝗲 𝗰𝗼𝗻𝗼𝗰𝗲𝘀... || Henry Danger

Capítulo 48

POV de ___

—¿No vas a decir nada? —Le pregunté.

Lo miré, estaba procesando lo que había oído. Sé que no quería aceptar lo que había pasado.

—Claro que no vas a decir nada. Estás pensando en varias formas en la que puedes defenderlo, ¿no? 

Ray lo quiere como un hijo, y como todo padre siempre encontrara la forma de defenderlo, sin embargo, no había forma de como rescatar a Henry de esta situación.

Había llegado a mi casa hace unos minutos, no podría especificar cuantos, pero lo que sé es que Ray había llegado preocupado por mí hace unos diez minutos. Me pidió que le explicara que había pasado y eso hice.

—¿Quieres que me quede? Tu mamá no va a venir hasta más tarde, no sé nada de tus hermanos.

—Quiero estar sola, pero no sola en la casa.

🍫 Al día siguiente 🍫

No tenía muchas ganas de salir, quería quedarme en mi cama mirando el techo por horas.

Anoche, después de que Ray me dejara sola, Jasper llegó preocupado, quería que le explicara lo que había pasado, él se puso a mi costado y le comencé a contar lo que paso con lagrimas en mis ojos. 

Se quedó conmigo toda la noche. Hace unos minutos se fue a su casa para cambiarse, ya debe de estar viniendo.

Mi mamá me había dicho para bajar a desayunar, pero yo le dije que no tenía hambre. Carla creo que sospecha algo, mas no me ha dicho nada. Por el lado de Leo, no he oído nada sobre él desde ayer.

—¿Puedo pasar? —Me preguntó Ray desde el otro lado de la puerta.

—Sí.

Posteriormente a esto él entra, con cuidado cierra la puerta y luego camina para después terminar sentado a mi costado.

—¿Cómo estás? 

—No sé, no quiero seguir llorando, pero no puedo. 

—Sabes, es mejor desahogarte de esa forma, porque después llegan otras formas de desahogo y no me gustaría que pases por ahí.

Por su mirada podía sentir que en algún momento de su vida paso por eso, no quería preguntar, así que solo me acerqué a él, me senté en mi cama, y puse mi cabeza encima de su hombro.

Nos quedamos así por algunos minutos, en un silencio cómodo, hasta que Jasper entra a mi habitación por mi ventana.

—Holi —nos saluda—. Te compre chocolates.

Ray miró a Jasper confundido y un poco molesto.

—¿Qué haces aquí? —Le preguntó.

—Estoy acá desde ayer.

—¿¡Ayer!?

—Sí, y cambiando de tema, ¿puedo tomarme el día libre? —Le consultó.

Ray iba responder algo, pero se detuvo, me miro y luego lo miro.

—Bien, pero lo quitaré de tu paga.

Después de eso, él se fue de la habitación, y me quedé con Jasper todo el día ahí. Él quería distraerme y a su vez sacarme una sonrisa, a veces lo lograba.