Capítulo 44

4.7K 425 315
                                    

Desperté asustada sintiendo el sonido de la puerta del cuarto, el temor a perder la vida mientras descanso sigue siendo un tema para mí, por lo que me estiré rápidamente para tomar el cuchillo en mi mesa de noche, apuntando a la asustada mucama qu...

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Desperté asustada sintiendo el sonido de la puerta del cuarto, el temor a perder la vida mientras descanso sigue siendo un tema para mí, por lo que me estiré rápidamente para tomar el cuchillo en mi mesa de noche, apuntando a la asustada mucama que se acercó con mi móvil entre las manos, pero no parecía asustada de mí.

— María ¿Qué sucede?

Tomando un poco de las sabanas para cubrirme el pecho.

— Señorita, llamaron muchas veces, demasiadas, decidí contestar para saber que es lo que querían y luego avisarle, algo pasó, la señorita Eris.

Abrí los ojos de golpe, tomando el móvil, desbloqueándolo, lo primero que encontré fue a Eris tirada en el piso, le sangraba la cabeza, estaba inconsciente, el cabecilla de los Lombardo posaba divertido, un bonito pie de imagen al final "Tu cabeza o la suya ¿Qué decides Boss? ¿Qué es más importante? ¿Qué hará la mafia italiana y la mafia internacional sin un cabecilla ahora que tu padre te ha abandonado?"

Apreté los dientes con fuerza haciéndolos rechinar ¿Qué tipo de pregunta era esa, joder? Eris es más importante por supuesto, Eris y Ares son mi todo.

— María, reúne tres de mis mejores escuadrones, llama a Santino, Aless y Vitto, ve si puedes levantar a mi círculo íntimo, de este par me encargo yo.

Señalando con la cabeza a Rhett y Ardan.

— Por supuesto señorita, tendré todo listo, los autos cargados y las armas necesarias.

Dando media vuelta, trotando fuera del cuarto, cerrando la puerta.

— Mierda... mierda... mierda... Si algo le pasa a Eris... si algo le sucede bajo mi cuidado...

Mordisquee mis uñas con nerviosismo saltando fuera de la cama directo al vestidor, necesito ir cómoda y por la preocupación, tengo mucho calor, demasiado, tomé un short, un top, bragas, calcetines y mis botas de cargo, con eso será suficiente, até mi cabello en una coleta alta y fui directo a mi gaveta de armas, tomando todo lo que podría necesitar, armándome hasta los dientes.

— Voy a matar a todos esos hijos de puta.

Ni siquiera el dolor físico será impedimento para arrancarles las extremidades una a una, dándoles una muerte lenta y dolorosa.

Fui a la cama prácticamente trotando, ubicándome entre las piernas de Ardan, moviendo a ambos con insistencia, Rhett parecía estar en otra galaxia, babeaba sobre el rubio, Ardan simplemente estaba como muerto, no reaccionaba, ambos confiados en que estarán bien, vivos, no cargan con el montón de traumas que tengo sobre mi espalda, podré estar muy cansada, pero si alguien entra en el cuarto dónde duermo... si escucho el más mínimo sonido, ya no puedo dormir más.

— A la mierda, no perderé el tiempo intentando despertarlos — bajando de la cama— Prefiero que se queden aquí a salvo — mirándolos— Con el yeso sólo serán un estorbo, no quiero que se lastimen.

Aradia "La selección" #2 (+21)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora