Abrió los ojos cuando los primeros rayos del sol tocaron su rostro, se sentía bastante cómoda con la manera en que estaba recostada, hasta que enfocó la vista y logró distinguir el rostro de Alphonse que la miraba desde arriba, allí fue cuando cayó en cuenta de que había estado durmiendo entre los brazos de él, la vergüenza se apoderó de ella y no supo como reaccionar, pero lo que si podría asegurar es que sus mejillas debían estar tan rojas como un tomate maduro.
- Buenos días bella durmiente - pronunció Alphonse con dulzura, logrando sonrojar más a Aome si fuera posible.
- A...A...A...L - tartamudeó - Bu...bu...enos di...días - con rapidez intentó incorporarse sólo para darse cuenta de que el alquimista la mantenía abrazada contra su cuerpo - Al, necesito levantarme... ¿Podrías soltarme por favor? - pronunció agachando la mirada por la vergüenza que sentía.
Alphonse vio que era cierto, Aome no podía levantarse porque él continuaba abrazándola - Lo siento - respondió y de inmediato soltó su agarre del frágil cuerpo de la sacerdotisa - No quería incomodarte.
Aome reaccionó ante la disculpa de Alphonse - No Al, no me malinterpretes, tú jamás me incomodarías - soltó un leve suspiro - Lo que pasa es que me siento avergonzada por haberme quedado dormida cuando se supone que estaba haciéndote compañía durante la noche... si ya lo sé, soy una pésima amiga.
«¿Amiga?... definitivamente esa palabra no me gusta, Aome si supieras que yo quiero que seas más que mi amiga, pero aún no es tiempo de decírtelo» Aprovechando que Aome continuaba sentada sobre su regazo, acercó su mano hasta el rostro de la joven y con suavidad la tomó por el mentón para obligarla a levantar la vista hacia él - No digas eso, me siento muy feliz de que hayas estado anoche conmigo y me dedicaras tu tiempo para enseñarme a bailar. No vuelvas a decir que eres pésima, porque por el contrario, yo pienso que eres maravillosa.
Un cálido cosquilleo revoloteó en su estómago al escucharlo expresarse de ella de esa manera, Alphonse era el primer chico que le decía palabras tiernas y la hacía sentir bella y especial - Gracias Al - respondió con una gran sonrisa, y en un impulso de valentía se puso de pie y le plantó un breve beso en la fría mejilla de metal dejándolo perplejo - Voy a ver a los demás, al parecer aún no han despertado... ¡Te veo en un rato! - pronunció dándose prisa para ingresar a la cabaña. Una vez adentro se detuvo recargando la espalda contra la pared de madera al sentir su corazón acelerado, no comprendía por qué estaba experimentando esas extrañas sensaciones que jamás antes había sentido.
- ¿Aome tienes fiebre? - le preguntó de manera inocente Shippo - Estás muy roja de la cara - él era el único despierto en ese momento, los demás continuaban durmiendo.
- Estoy bien Shippo, no te preocupes - contestó en voz baja y regalándole una sonrisa, luego se dirigió hasta su saco de dormir y lo enrolló para guardarlo.
Inuyasha despertó estirando con fuerza los brazos y emitiendo un ruidoso bostezo que despertó a los demás.
Miroku fingiendo estar dormido posó una mano sobre los pechos de Sango y les dio un ligero apretón, recibiendo en respuesta una fuerte bofetada.
Winry se sentía bastante cómoda, su almohada era muy cálida, incluso podía escuchar los latidos de su corazón contra su oído «Un momento... ¿Latidos de corazón?» abrió los ojos abruptamente y levantó el rostro para toparse con los hermosos ojos dorados de Edward mirándola con ternura, quedó encandilada por unos segundos con su mirada «¿Estaré soñando?» levantó la mano y tocó la cara de Ed «¡No es un sueño, es real!» - ¡Ed que bueno que regresaste! - no pudo ocultar su alegría.
- Llegué anoche pero no quise despertarte - respondió con voz serena y una sonrisa.
Continuaron mirándose a los ojos unos segundos más... oro y zafiro... olvidándose de todo a su alrededor, sólo existían ellos dos, con lentitud comenzaron a acercar sus rostros, los labios de ambos se encontraban muy cerca, cerraron los ojos dejándose llevar, la distancia continuó desapareciendo... cinco centímetros... cuatro... tres... dos...
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Alquimistas en el Sengoku
Fanfiction¿Que sucedería si Edward y Alphonse deciden buscar la perla de Shikon para recuperar sus cuerpos? ¿Y si por accidente caen dentro del pozo devorahuesos y se encuentran con el grupo de Inuyasha? Este crossover de Inuyasha y Fullmetal Alchemist Brothe...