El ardor del fuego consumía todo a su paso, pero de entre las llamas renació un niño, sus recuerdos pasados convertidos en cenizas. Emergió en un mundo cubierto de desolación y desesperación, donde la esperanza parecía una quimera distante. El niño, Shirou Emiya, comenzó su nueva vida sin saber lo que le dejó en esta realidad aislada.
Un alma benevolente lo tomó bajo su protección, un hombre que había enfrentado innumerables tragedias y había emergido como un héroe. Shirou encontró en él una figura paterna, alguien que lo guió en su camino hacia la nobleza y la rectitud. Le enseñó los valores del coraje, la compasión y la lucha por la justicia.
Bajo su tutela, Shirou creció en este mundo devastado, adoptando su nuevo nombre con determinación. Aunque sus recuerdos de su vida anterior se desvanecieron, su deseo de ser un aliado de la justicia ardía en su corazón. Su mentor le habló de un sueño que una vez había sostenido, y Shirou se comprometió a llevar ese sueño a la realidad.
La pérdida llegó de nuevo a la vida de Shirou cuando Kiritzu, su mentor y figura paterna, murió. A pesar de la devastación, Shirou no se rindió. Con la ayuda de lo que esperaba a su hermana mayor, encontré la fuerza para seguir adelante y honrar la memoria de su mentor.
La escuela y sus nuevos amigos se cerraron en un bálsamo para su corazón herido. Sin embargo, el deseo de ser un héroe seguía latente, aunque distante. Practicaba la magia increíblemente, esforzándose por mejorar su habilidad en la creación de armas. A pesar de sus esfuerzos, sintió que avanzaba lentamente.
Entonces, un giro inesperado lo sumergió en un conflicto monumental: la guerra del Santo Grial. Una competencia sangrienta entre magos por el Grial, un artefacto que podía conceder cualquier deseo. A pesar de su renuencia, Shirou se vio envuelto en el torbellino de la guerra y adelantado invocar a Saber, un poderoso guerrero del pasado.
Entre batallas y desafíos, Shirou y Saber forjaron un vínculo profundo que eventualmente se convirtió en amor. Sin embargo, como todo en ese mundo desolado, su felicidad fue efímera. Después de derrotar al rey de los héroes, Shirou tuvo que despedirse de Saber, con la promesa de un reencuentro futuro.
El tiempo pasó y Shirou ingresó en la Torre del Reloj, buscando conocimiento y poder para cumplir su deseo. Sin embargo, sentí que algo le faltaba. Aunque se graduó y dejó atrás a Rin, su amiga y compañera, sintió un vacío en su corazón. Sabía que debía emprender un viaje para encontrar su verdadero destino.
Rin intentó detenerlo, pero su determinación era inquebrantable. La separación fue inevitable, y Shirou se aventuró solo en busca de su camino. Recorrió el mundo en busca de propósito, pero encontró más preguntas que respuestas.
La muerte lo encontró de manera abrupta y misteriosa, llevándolo de este mundo. Pero la trama del destino no había terminado con él. Abrió los ojos en un nuevo mundo, confuso y desorientado. Se encontró con una mujer en estado lamentable y un padre ausente. Los misterios y desafíos de este mundo desconocido le aguardaban, y Shirou estaba a punto de descubrir si seguía deseando ser un héroe en un milenio tan oscuro.
La guerra era constante, la esperanza se había desvanecido y Shirou se enfrentaba a su mayor desafío: descubrir si su llama interior de justicia seguía ardiendo en un mundo sumido en la desesperación.
Este era el Milenio 41, un tiempo de tinieblas en el que Shirou Emiya se vería forjado de nuevo por el fuego de la adversidad, y donde su búsqueda de heroísmo podría ser la última chispa de luz en una era de oscuridad eterna.
ESTÁS LEYENDO
LA ESPADA DEL EMPERADOR
De TodoUn chico con unos ideales de héroe luego de un gran viaje reencarna en un nuevo mundo desconocido con peligros desconocidos y aliados por venir Será la esperanza del imperio y simplemente será una espada más enterrada en los sueños y esperanzas de...