Un chico con unos ideales de héroe luego de un gran viaje reencarna en un nuevo mundo desconocido con peligros desconocidos y aliados por venir
Será la esperanza del imperio y simplemente será una espada más enterrada en los sueños y esperanzas de...
Del cielo varias naves cayeron sobre la superficie de la tierra aplastando varios soldados y orkos por igual. Eran los Ángeles de la Muerte, también conocidos como Marines Espaciales, super soldados modificados genéticamente para ser superiores a los humanos normales. Medían un total de 2 metros como mínimo y poseían grandes armaduras que protegían todo su cuerpo. En esta ocasión, eran los Ultramarines Espaciales, reconocibles por su color azul característico.
Los orkos solo sonrieron al verlos, ya que para ellos, batallar contra los Marines Espaciales era mucho más entretenido que enfrentarse a simples soldados imperiales.
-¡WAAAGH! - grita Bruz, haciendo que todos los orkos griten en respuesta, emocionados por la perspectiva de la batalla.
Mientras tanto, con Shirou y su grupo:
Dentro de la nave imperial, se abren camino a través de las múltiples salas. Divididos en grupos, Shirou y Barri, por un lado, y Vox y sus hombres por otro, se enfrentan a los obstáculos que les salen al paso.
Shirou se encuentra enfrascado en un duelo mortal con un Ultramarine. La armadura y la fuerza del marine espacial son formidables, pero Shirou utiliza sus habilidades y armas para mantenerse a la altura. Logra evitar un golpe de la espada motosierra del marine y contraataca con ferocidad, lanzando espadas y materializando armas para mantenerlo a raya.
Finalmente, después de una lucha intensa, Shirou logra incapacitar al marine y lo remata con su propia espada motosierra. Adolorido por los disparos recibidos y agotado por el enfrentamiento, observa el arma del Ultramarine, un bolter, y decide dejarlo de lado para tomar su propia arma de diseño único.
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Mientras tanto, Barri se separa del grupo principal para ayudar a los hombres de Vox, que están teniendo dificultades en su enfrentamiento contra los Marines Espaciales. Uno de los marines se acerca peligrosamente, y un miembro de la pandilla intenta atacarlo con una espada motosierra, pero es brutalmente aplastado por el marine.
El marine arroja el cuerpo sin vida hacia otro miembro de la pandilla, que no logra esquivarlo y recibe un tiro en la cabeza. La situación es crítica, y Vox observa con angustia mientras sus hombres son superados por los implacables marines.
-Mierda, nos están masacrando - grita Vox, sintiendo la desesperación de la situación.
Pero entonces, Barri llega con su rifle modificado y se lanza al ataque. Dispara una lluvia de proyectiles que obliga a los Marines Espaciales a retroceder momentáneamente, y el licenciado aparece montado en una especie de garrapato gigante, abriendo fuego con armas duales.
Los garrapatos explosivos se unen al combate, corriendo hacia los marines y explotando a su paso. Los hombres de Vox aprovechan la oportunidad para coger las armas de los marines caídos y unirse al combate.
La marea de la batalla parece estar cambiando a favor de los rebeldes, y con la ayuda de Barri y el licenciado, Vox y sus hombres logran igualar las fuerzas en el enfrentamiento contra los Marines Espaciales.
Mientras tanto, Shirou continúa avanzando por la nave imperial. Utiliza sus habilidades y armas para enfrentarse a los guardias y abrirse camino hacia el centro de control, donde espera encontrar una manera de liberar a los prisioneros y cumplir su objetivo.
Justo cuando estaba a punto de entrar en el centro de control, escucha un sonido de aplausos que lo toma por sorpresa.
