acto 6 llevándose bien

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Kiken y Shidou habían notado que Shirou y Zoru cada vez se llevaban peor. Al principio parecía que podrían ser amigos, pero desde lo que sucedió en el planeta, su relación había empeorado considerablemente.

Era evidente en las expresiones de ambos: Zoru mostraba un rostro de enojo y odio, mientras que Shirou lucía irritado y rencoroso.Kiken suspiró al ver a los dos en la habitación, en completo silencio y evitándose mutuamente.

-Parece que tu padre y Zoru no están en los mejores términos después de todo -
comentó Kiken, observando la tensión en la sala.

¿Por qué no entras y tratas de hacer que hablen entre sí? Tal vez eso podría solucionar sus diferencias - sugirió Shidou, animando a Kiken a intervenir.

No es una mala idea. Eres una niña humana muy inteligente - dijo Kiken con una sonrisa, acariciando la cabeza de Shidou.

Gracias, mami - respondió Shidou con una sonrisa traviesa.

Kiken entró en la habitación y notó cómo tanto Shirou como Zoru seguían mirándose con hostilidad.

Vaya, vaya... parece que tenemos un enfrentamiento de miradas aquí - dijo Kiken con un tono juguetón mientras se interponía entre los dos, intentando aligerar la tensión.

Zoru resopló y miró a otro lado, mientras que Shirou cruzó los brazos y miró por la ventana.

- ¿Qué tal si dejamos de lado esta competencia silenciosa y hablamos? - propuso Kiken, mirando de uno a otro.

-No hay nada de qué contar, señorita Kiken", dijo Zoru con un tono de respeto hacia su superior.

-Y tú, Shirou, ¿no tienes nada que contarme?- preguntó Kiken, dirigiéndose ahora a Shirou

-¿Qué te importa, mujer?-respondió Shirou con seriedad.

-MALDITO HUMANO! ¿CÓMO TE ATREVES A HABLARLE ASÍ?- exclamó Zoru levantándose de su asiento.Kiken lo calmó con un gesto y Zoru volvió a sentarse, aunque su enojo era evidente.

-Bueno, ya que ninguno de los dos parece dispuesto a contarme lo que pasó, creo que recurriré a otro método para que se lleven bien entre ustedes-, propuso Kiken mientras Shidou le traía un cuaderno y una pluma."

-¿Qué tal si cada uno dice cosas positivas del otro y luego cosas negativas- sugirió Kiken con una sonrisa.

Shirou y Zoru intercambiaron miradas desafiantes, pero finalmente Shirou suspiró y aceptó la propuesta.

"Bueno, supongo que es muy útil al momento de organizar la ciudad, aparte de que su intelecto y conocimiento tecnológico han sido útiles para el imperio", dijo Shirou de manera sincera, mientras Shidou anotaba sus palabras y escribía la palabra "honesto" debajo.

"Muy bien, Shirou, así se hace", comentó Kiken con aprobación. Luego dirigió su atención hacia Zoru. "Ahora, Zoru, ¿hay algo que quieras decir sobre Shirou?"

Zoru pareció meditar por un momento antes de hablar. "Él... sirve como carne de cañón", dijo Zoru de manera molesta, lo que provocó una mirada de enojo de parte de Shirou.

"Ok... eso es bueno, supongo", comentó Kiken un tanto incómoda ante el comentario negativo de Zoru. Ella escribió la palabra "resentido" debajo de su declaración.

La atmósfera en la habitación se volvió tensa de nuevo, pero Kiken decidió intervenir para mantener las cosas en calma.

"Bueno, parece que hay opiniones variadas sobre Shirou", comentó Kiken con una sonrisa forzada. "Pero lo importante es que están compartiendo sus perspectivas y, con suerte, esto ayudará a mejorar su relación en el futuro."

Shirou y Zoru intercambiaron miradas de desconfianza,

"Bueno, ahora las cosas malas. Zoru , comienza", sugirió Kiken.

Zoru  tomó un momento para pensar antes de hablar.

-Bueno, es impulsivo, torpe e inmaduro. Se lanza al ataque sin pensarlo, igual que un orko. Seguramente es por eso que te siguen, porque el número de neuronas es igual-dijo zoru con una pizca de sarcasmo, provocando una rápida burla hacia shirou

Shirou  se apresuró a responder.

-Bueno, tú eres bastante rencoroso y molesto en la mayoría de las ocasiones. Lo único que has hecho es molestarme con estupideces. Oh, y no puedo dejar afuera tu jodida xenofobiah -le dijo a zoru , y su tono se volvió más agresivo mientras una vena de enojo aparecía en su frente.

En un instante, Zoru se puso de pie y agarró la camisa de Shirou, apretando con fuerza. Sus palabras llenas de enojo salieron disparadas.

-Si es cierto que te jodo mucho, ¿sabes por qué? Porque es por algo. No tenían ningún tipo de organización, ni siquiera tenías un nombre. Tú solo tienes un sentido de la realidad completamente alterado y crees que todo el mundo te sigue porque eres un buen líder, pero la verdad es que solo te siguen porque eres lo único que hay- dijo Zoru mientras su enojo iba en aumento.

Shirou suspiró, sintiendo la tensión creciendo entre ellos. Sin embargo, en lugar de responder con más agresión, decidió tomar un enfoque diferente. Agarró la mano de Zoru y lo miró fijamente a los ojos.

-Escúchame una cosa, ya te lo había dicho y te lo volveré a decir: ahí está la puerta. Así que bien, te puedes ir directo a la mierda- dijo Shirou en voz alta, dejando a Kiken en shock por la intensidad de sus palabras.

Kiken intervino rápidamente y separó a ambos antes de que la situación escalara aún más.

-Ya es suficiente, Zoru. Recuerda que Shirou peleó contra un harlequin, y Shirou, recuerda que Zoru aún es importante - dijo Kiken, tratando de calmar a ambos y recordarles la importancia de mantener la calma y la perspectiva en medio de su conflicto.

-¿Acaso estás de su lado, Kiken?- preguntó Zoru enojado, dirigiéndose a ella con desconfianza.

Kiken suspiró y respondió con sinceridad,

-Sinceramente, no sé lo que pasó, pero algo me dice que Shirou no es nada más que una víctima de esto-

Zoru miró a Shirou con una mirada penetrante, tratando de entender lo que Kiken quería decir.-

Finalmente, Zoru se alejó sin decir una palabra, dejando a Kiken y Shirou solos en la habitación. Kiken se dirigió a Shirou con preocupación en sus ojos, buscando respuestas.

-¿Qué fue lo que pasó, Shirou? Por favor, dime. No entiendo por qué Zoru se comporta así. Es cierto que es serio y xenófobo con... bueno, todos, pero no entiendo por qué especialmente contigo-, preguntó Kiken, buscando comprender la dinámica entre Shirou y Zoru.

Shirou reflexionó por un momento, pensando en si debía contarle a Kiken la verdad. Finalmente, decidió ser honesto, pero con límites. "

-Lo siento, Kiken. Es algo privado entre él y yo. No puedo contártelo"-respondió con pesar. Sabía que revelar demasiado podría socavar la confianza que Kiken tenía en él.

Kiken salió de la habitación, preocupada por Zoru y lo que estaba sucediendo entre ellos. Mientras tanto, Shirou se quedó solo, mirando pensativo por la ventana. A pesar de los problemas entre él y Zoru, una nueva preocupación comenzaba a surgir en su mente: alguien se había infiltrado en su imperio.

LA ESPADA DEL EMPERADOR Donde viven las historias. Descúbrelo ahora