Solo yo #2

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'Bad liar' Imagine Dragons

Al día siguiente me levanté con un poco de resaca emocional.

Ese día tenía una entrevista en la radio, así que me tomé mi tiempo para prepararme y, sobretodo, mentalizarme.

Me encantaba hacer todo eso de las entrevistas y demás, pero necesitaba siempre ir bien preparada, sino me ponía demasiado histérica.

Al medio día me recogió un coche y me llevó directa al estudio donde Jeannine ya me esperaba. Me entregó un guion con varias de las cosas que debía recordar mencionar a la entrevistadora si ella no lo hacía y traté de memorizarlas lo mejor posible.

Al final no me hizo falta sacar a la luz nada de lo que me había ordenado mi representante porque, durante los 45 minutos que estuve sentada dando respuestas, intentaron averiguar de todo, y cuando digo todo, es todo, vamos que les faltó preguntarme por mi número de la seguridad social.

Me irrité un poco cuando de repente empezaron a bombardearme con preguntas acerca de mi vida personal, de mi familia, de mis amigos, pareja, y demás. No sé muy bien cómo logré salir al paso de ese caos, pero más o menos me las apañé.

Cuando volví a casa estaba agotada así que me tiré a ver cualquier cosa en el sofá.

Creo que debí quedarme dormida y Blair debió de llevarme a la habitación porque me desperté a las 3 de la mañana y estaba metida en mi cama, así que traté de volver a dormirme.

Cuando me levanté, Blair ya no estaba en casa, me comí una tostada y me fui directa a la cafetería, pero tampoco estaba ahí.

-Nerea- golpeé la puerta de su despachito, antes de entrar- Oye, ¿sabes dónde se ha metido Blair?

Se encogió de hombros, sin levantar la vista de unos papeles.

-No estaba en casa, pensé que habría venido temprano pero tampoco está aquí.

Entré y me apoyé contra su mesita pero siguió sin mirarme.

-Ni idea, Blair... quiero decir, Leyre- fruncí el ceño.

-¿Estás bien?- rodeé la mesa y me planté a su lado, no era normal en Nerea estar así de distraída.

-No- y soltó de golpe los papeles, esparciéndolos por la mesa- Este es el contrato del nuevo cocinero- y me plantó delante de la cara uno de los folios, así que no podía leer nada.

Agarré su mano y la separé un poco.

-¿Y...?

-Qué ya estaba todo listo y ahora el muy cabrón quiere más dinero.

Cogí el papelito y traté de leer las condiciones.

-Le voy a mandar a la mierda- y se levantó de golpe, haciendo un estruendo con la silla, pero antes de que saliera por la puerta, la detuve por el brazo.

-Nerea, a ver, espera, no te precipites.

-¿Qué no me precipite? ¿Pero tú has leído lo que pide ese desgraciado? ¿Qué se piensa? ¿Qué soy rica?

-Vale, ya, obviamente esa cantidad de dinero es descomunal, pero las cosas pueden hablarse desde la calma...

-¿Desde la calma?- y me puso una mueca- ¿Quién eres tú y qué has hecho con Leyre?

-Eh...- me rasqué la cabeza.

-Mira, ya tengo suficiente con aguantar el buen humor y la paciencia de Blair, no necesito dos como ella. Lo que necesito es que me acompañes a echar a patadas a 'ese' de aquí.