"72"

338 48 3
                                    

Narra Fabián Hoffman

Me removí en la cama y abracé más a Grecia, quien estaba pegada a mi pecho como si su vida dependiera de ello. Acaricié su cabello y besé su frente.

Me levanté de la cama con cuidado de no despertarla, me dí una ducha. Me cambié por una ropa ligera, ya que no pensaba salir hoy.

Después del abrazo que Grecia tuvo con Jake se había ido a dormir feliz. Era un reto el que teníamos que afrontar, decirle que somos sus padres, aún que sobre eso hablaría con Elena antes, ella lo conoce bien, y él a ella, así que si ella debía hablar antes, o con nosotros con él, quizá todo sea más sencillo.

Salí de la habitación, oí ruidos en la cocina. Me detuve al sentir mi celular vibrar; ví el número, Colton.

—Hola Colton ¿Cómo estás? —dije

—Bien. Me enteré de que tú hijo está vivo, felicidades

Colton era un amigo fiel, no importa lo que sintió por mi esposa, aún seguía siendo alguien de mi máxima confianza.

—¿Averiguaste lo que te pedí? —salí al jardín un segundo

—Si

—Y...

Después de lo que me dijo Jake, enseguida le hablé a Colton para saber algo al respecto.

—¿Recuerdas esa vez en Italia, que te llamé diciendo que Luca iba para allá?

—Sí claro —¿Cómo olvidarlo? Ese día Grecia me oyó

—Lo hizo como una especie de distracción para ti

—¿Qué? ¿Sabía que estaba vivo?

—Fabián, esto no se puede hablar más por teléfono ¿Puedo ir a tu casa en unas horas?

—Si, por supuesto. Aquí te veo

—Bien.

Ahora sí no podía estar tranquilo, Luca sabe mucho, y si para la hora en la que estábamos ya había hablado con Albert. No estábamos seguros, ese hombre iba a venir aquí, y esta vez nos mataría a todos, se llevaría a Jake y quizá a Elena la mataría sin piedad alguna.

Entré en la casa otra vez. Entre en el comedor y ví que todos ya estaban comiendo, Incluso Grecia, quien al verme me sonrió

—Buenos días —hablé para todos

Me senté en la cabeza de la mesa. Mire a Grecia de pies a cabeza y articule:

—¿Vas a salir?

Elena río por lo bajo y negó comiendo

—Si —habló el niño por ella —Grecia me invitó a ir con ella

—Vamos a la oficina —me dijo mordiendo su labio inferior

—No creo que sea buena idea. —la mire

—¿Por qué? —se quejó Jake

—No pasará nada amor —tomó mi mano —Será rápido

—¿A dónde vamos? —les pregunté

Ambos se miraron y rieron

—Solo iremos Jake y yo —fruncí el ceño

—Ellos salen y mientras regresan tu y yo hablamos —sentenció Elena

—De acuerdo. Pero no salgan solos, lleven guardias  —exigí

—Bien

Grecia besó mis labios sutilmente y Jake se despidió de mí con su mano. Solo iba a dejar que salieran por qué de verdad iban con cuatro camionetas con sigo, aún que no iba a dejar que salieran solos.

Una Vida a tu Lado Donde viven las historias. Descúbrelo ahora