Capítulo 27 | Nuevos Reclutas |

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Las semanas pasaban y los labores continuaban para todos, mientras algunos entrenaban a morir gracias a Levi, yo en cambio seguia con el proyecto con Hange despistadamente le sugerí lo de las lanzas relámpagos una idea que a ella le fásico. Mi día era algo agitado terminaba una tarea y empezaba otra iba de un lado a otro apenas lograba comer uno o dos alimentos al día o bien ninguno, en cuanto a mi relación por asi decirlo con Levi seguia igual cuando estamos ante los ojos de los demás.

Cuando caía la noche y estábamos los dos solos era algo distinto y eso me gustaba porque conocía una parte de él que no todos o más bien ninguno conocía, cada noche iba a mi recamara a dormir, pero antes saciábamos nuestro placer. Platicábamos de lo que hicimos en el día y las estrategias que se podía llevar a cabo en siguientes expediciones nuestras platicas eran amenas más acompañadas con una taza de té.

Me levante un poco más temprano de lo normal, voltie para ver a la ventana percatándome que todavía no amanecía. Mire a mi derecha viendo que Levi seguia dormido plácidamente con el torso descubierto, contemple por un momento su rostro, cada facción estaba relajadas como si no hubiera preocupación alguna a nuestro alrededor. Cuidadosamente acaricie su mejilla tratando de no despertarlo.

—Buenos días

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—Buenos días...—me dijo con la voz ronca, esa voz que me encanta.

—Perdón no queria despertarte.—se acomodó en la cama de tal forma que su espalda la recargo en el respaldo de la cama.

—Descuida, sentí cuando te despertaste y por tus escandalosos ronquidos.

—Yo no ronco maldito.—o eso es lo que espero.

—Eso es lo que crees tú.—paso su mano por su cabello.—No sé quién ronca peor si tu o un oso.

Tome mi almohada para aventársela a la cara, pero logro esquivarla apuñe una mano para golpearlo en su pecho, ágilmente tomo mi canilla y la estiro acercándose más a mí.

—Me gusta más cuando gimes.—mis mejillas pronto se pusieron rojas o más bien mi cara entera.

Juntamos nuestros labios formando un beso apasionado, una de su mano se colocó detras de mi cabeza para recostarme en la cama nuevamente, bajo un tirante de mi blusón dejando un camino de besos húmedos desde mi cuello hasta mi clavícula, bajo el otro tirante para descubrir mis pechos los cuales fueron estimulados por sus manos mientras que sus besos regresaban a mis labios, una de sus manos fue metida dentro de mi braga para introducir dos dedos, entre el beso solté un gemido ante tan repentina acción.

Tomo mi cintura con fuerza para girarme de tal modo quedara boca abajo sin soltarme alzo mi trasero, subió mi blusón y bajo con prisa mis bragas dejándolas en mis muslos, de un movimiento me penetro.

—Ahhh...~—aprete las sábanas con mis manos.

Tal parece que se despertó con una jodida erección ya que sus vaivén eran intensos, en la habitación los sonidos que se escuchaban eran mis gemidos casi gritos, mi trasero chocando con su pelvis, pero también los gruñidos guturales que salían de su garganta. Ante esta posición sentia su miembro muy profundo dentro de mi, cada vez aumentaba sus movimientos tuve que morder las sábanas para no gemir tanto, descaradamente me daba pena si alguin nos escuchaba, aunque no es la primera vez que hacemos esto y no creo que sea la última.

≪•°Desire To Protect You°•≫Donde viven las historias. Descúbrelo ahora