Capítulo 72 | Sopresa |

182 17 3
                                    

Al regresar al distrito Trost tanto Hange como los capitanes fueron hacia el muro Sina a informarle nuestro hallazgo a la reina mientras que el resto nos quedamos en el cuartel cumpliendo nuestros deberes. Llevaba tiempo sin entrenar debidamente por lo que mi rendimiento fue bajando, me peso con toda el alma completar 4 vueltas cuando antes completaba 10 o más sin problemas, mis compañeros de escuadrón entrenaban aparte de mi por obvias razones me han superado mucho, tendré que esforzarme más para ser como la Navier de antes.

Pase el resto del día entrenando, sude como nunca lo eh echo. Me encontraba acostada en el suelo debajo de un árbol regularizando mi respiracion.

—¿Estas bien?

A duras penas levanto mi torso, mi sorpresa fue ver a Dalia enfrente de mí.

—Hola, supiste llegar al cuartel de la legión ehh.

—Si, tuve que preguntarle al doctor Leo. Vine porque queria verte, puede que no te importe, pero tu padre se esta recuperando bien, estaremos un par de días más aquí antes de regresar al distrito Karanese.

—De acuerdo.

Pensándolo bien, eso no me tiene sin cuidado si se recupera o no, es algo que me da igual.

—Lamento las circunstancias de como vistes a tu padre de nuevo. Se puede decir que lleva años sufriendo por todas sus quemaduras, desconozco como era su relación entre ustedes. Pero, un perdón no le hace daño a nadie.

—Por qué perdonar a alguien que no ha pedido disculpas. Te agradezco el que estes cuidando a mi padre todo este tiempo, puede que no haya sido fácil para ti sabiendo que tienes familia.

—Descuida, se puede decir que es una manda que estoy pagando. —me regalo una sonrisa.

—Yo no pienso ir con él.

—Lo sé, no vine para convencerte de que te vayas con él. Los problemas que tengan ustedes dos yo no me meteré en eso, respetare la decisión que tomes.

—Gracias.

Nadie es perfecto en este mundo todos tenemos algunos defectos y eso esta bien, pues son esos defectos que nos hacen únicos y diferentes de todos.

Las semanas iban pasando rápidamente, Levi y yo nos levantábamos temprano antes que todos despertaban para entrenar. Nuevamente volvió a entrenarme la diferencia ahora es que es un poco mas suave conmigo, un poco casi nada despues de entrenar con él seguia entrenando con el escuadrón, algunas veces Hange, Armin y yo seguíamos en la mejora del equipo de maniobras tridimensionales.

Cuando habia tiempo libre para mí, me escapada para ir a la cabaña de Margot tocaba sin tener una respuesta debo admitir que si la echo de menos. Precisamente hoy tenía algo de tiempo libre así que me dispuse a ir nuevamente a esa cabaña que veía de lejos, detuve a mi caballo al ver que de ella salía humo de la chimenea sin poder creerlo talle mis ojos para corroborar eso estando en lo cierto me apresure en llegar.

Toque la puerta repetidas veces, mis nervios aumentaron ante el sonido de unos pasos aproximarse a la puerta.

—Margot

Ella me veía sorprendida, abrió ligeramente su boca y sus ojos juro que espere una reacción diferente, en cambio me cerro la puerta en la cara.

—Que mierda—golpe la puerta. —¡Ábreme Margot!

—Vete de aquí Navier. —dijo del otro lado de la puerta.

—Que carajos te pasa, desapareces un tiempo y te comportas así. No sabes lo preocupada que eh estado.

—Navier vete, por favor.

—¡No! No me ire de aquí hasta que hablemos.

—¡Que te largues Navier!

≪•°Desire To Protect You°•≫Donde viven las historias. Descúbrelo ahora