≪•°Desire To Protect You°•≫

Capítulo 49 | Preocupación |

Navier POV

Nos separamos al escuchar la voz de Hange, mis mejillas estaban rojas y mi corazón acelerado las palabras de Levi me han quitado un malestar de esos que aunque lo trates con medicamento sigue ahí, ahora ese sentimiento y sensación desaparecieron.

—Adelante.

La puerta se abrió, mire de reojo a Levi el cuál la miraba con mucho odio. Lo inesperado es que no entro sola atrás de ella estaba Luka, mierda...

—Ah, Levi estás aquí también.—por su parte no respondió.—Siento interrumpir, pero este muchacho quería saber si ocupabas ayuda.

—No.—ni me dejó decir nada.—No necesita la ayuda de ese pend...

—Ya termine.—me puse enfrente de Levi pero dándole la espalda.—Levi vino ayudarme.

—Puedo ayudarte a llevar las cajas.—dijo Luka muy amable.—Se ven pesadas.

—Oye, no me subestimes soldado.—lo mire alzando una ceja.

—Cierto, eres más fuerte que muchos que yo conozco.

—Entonces nos retiramos, nos vemos chicos.

Hange tomo a Luka de los hombres y se lo llevo casi a arrastras, en verdad quería ayudarme, pero no era necesario. Además, no quiero que Levi cometa una locura.

—Maldita escoria, ese imbécil no me agrada.—gire a verlo.

—¿Hay alguien que si te agrade?

—Tú.

Sonreír por la respuesta que dio, me acerqué más para colocar mis manos alrededor de su cuello mientras que la suyas estaban cruzadas sobre su pecho, lo besé de una manera tierna.

—Andando, debemos llevar estas cajas con nuestras cosas.

—De acuerdo.

Ambos comenzamos a llevar las cajas a la carreta donde Levi puso las cosas de su oficina. Una vez que todo estaba listo montamos nuestros caballos dirigiéndonos al cuartel principal donde estábamos antes, admitió que echare de menos este cuartel, el camino fue todo menos silencioso en especial por los chicos que iban contando sus anécdotas de cuándo estaban la tropa de reclutas en especial cuando hicieron una misión en pleno invierno con capas de nieve. Sólo espero que esta vez no caiga tanta nieve.

Al llegar empezamos a bajar las cosas de las carretas acomodándolas en nuestras respectivas habitaciones, en mi caso fue la misma habitación que antes, baje las cajas al piso viendo el polvo que se notaba en cada mueble, esto no es nada bueno...

—Joder... es una porquería esta habitación y mi oficina también.—giré hacia atrás para verlo, con el ceño fruncido.

—Encárgate de tu oficina yo de mi habitación.

—Nuestra.—lo mire confundida.—También dormiré aquí, así que asegúrate de limpiar cada maldito rincón.

—Si capitán.

Le di un beso en la mejilla, él se retiró de la habitación estoy segura que limpiara hasta los libros que ni ha leído. Me hice una media coleta me coloque un pañuelo en mi boca para empezar a limpiar todo, cada mueble estaba cubierta de una capa fina de polvo, mi estancia en esta habitación fue poca pero lo que si recuerdo es que la cama era muy suave y cómoda quite las sábanas para hacerlas bola y dejarlas en el piso pues era más que obvio que las tenía que lavar. Al terminar de quitar ese jodido polvo, fui acomodando lo que teniamos en las cajas, tanto mi ropa como su ropa las iba acomodando en la cómoda grande, decidí que la mitad de cajones serán para Levi y la otra mitad para mi empecé a doblar la ropa para guardarla en los cajones el dobles tiene que ser perfecto, en el fondo de una de las caja noté que estaba el típico pañuelo que usar Levi siempre, bueno últimamente no lo usa... lo que yo sé, es que ese pañuelo es un pedazo de uno de los vestidos de su madre.