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─¿No creen que hay demasiada gente?

Los presentes alzan los hombros, murmuran palabras que no logran entenderse a la perfección debido a la música de fondo y otros solo hacen gestos de que, en realidad, no importa lo suficiente. De eso se tratan las fiestas, ¿no?

─Sinceramente ─Chenle comienza a hablar─. Ni yo mismo sé cómo es que tanta gente se enteró de esto.

Y rápidamente, las miradas recaen en Park Jisung, quién hace un momento se había sentado en el sofá de la sala para beber una cerveza.

Este último abre la boca y se señala a sí mismo con una indignación muy mal actuada. Aunque es cierto, todos lo saben y él tampoco puede mentirse a sí mismo, porque, en cuanto Chenle confirmó que haría una fiesta después de muchísimo tiempo, lo gritó a los cuatro vientos. Invitó gente como si fuese su fiesta y les aseguró que sería incluso mejor que las planeadas por carreras completas.

Y, la verdad, es que Jisung no se equivocaba del todo. Una persona como Chenle, que solía sentirse atraído hacia las fiestas e hizo varias en su adolescencia, sabe perfectamente la manera en que funcionan. Sabe como hacer que la gente se divierta.

─Solo le faltó pegar papeles por toda la universidad, anunciando una fiesta que ni siquiera él mismo planeó ─Renjun exclama, rodando los ojos.

Y es verdaderamente divertido, porque Renjun hace el esfuerzo de parecer el mismo ser insufrible de siempre, pero su mano está sujetando con fuerza la de Seungmin, y solo eso necesitan para tener en claro que no odia tanto la idea de estar allí.

─Ni lo menciones ─Hyunjin susurra y dramatiza un poco─. Tenemos traumas con papeles pegados por toda la universidad...

─Habla por ti, yo estoy bien.

Es el turno de Hyunjin de rodar los ojos, no disimula y el resto ríe.

─Como sea, ya estamos aquí ─Jeno alza los hombros y le enseña el dedo del medio a Han Jisung cuando se burla de su voz ronca.

─Yo voy a beber ─Minho dice con total sinceridad. Avanza unos pasos, no sin antes decirles en modo de despedida─: Acabo de ver unas botellas de vodka por allá...

Donghyuck ríe y sigue a su mejor amigo, negando con la cabeza. Por supuesto, primero se despidió de Mark con un beso en la mejilla, y cuando llegó donde Minho, ambos entrelazaron sus brazos como dos señoras caminando por el centro comercial. El par desapareció entre la gente y dio inicio a la dispersión bastante rápida del grupo.

Y todos comienzan a pararse. Van a bailar, a beber o simplemente a conversar con otras personas de la universidad.

Así, hasta que solo quedan Chenle y Park Jisung sentados en el sofá.

El menor infla sus mejillas y suelta un largo suspiro. De repente, se siente demasiado nostálgico. Solo puede observar hacia el lado y ver cuánto han crecido en los últimos años. Por supuesto, tomando en cuenta que su primer beso con Chenle fue en una fiesta de ese tipo, ambos siendo unos adolescentes inexpertos, él bebiendo por primera vez y creyendo que ese momento podría durar por siempre.

─Estoy aburrido ─dice Jisung, a lo que Chenle no tarda en mirarlo con una ceja alzada, sin poder creerlo.

─Estás en una fiesta. ¿No que extrañabas este tipo de cosas?

─Ah, sí ─la mano de Jisung sujeta su rodilla, hay un hueco en el pantalón que le permite tocar la piel fría y blanquecina de Chenle─. Pero ya sabes, soy un hombre que necesita de mucha paciencia.

El mayor suelta una carcajada, a la vez que se cruza de brazos y ladea un poco el rostro. Jisung lo está mirando con sus ojos oscuros que, si bien han cambiado bastante y ya no le pertenecen al chico inocente de dieciséis, siguen teniendo ese brillo que le hace suspirar y sentirse tan enamorado como la primera vez que lo vio en su salón de clases.

Dream BabiesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora