Breaking the mold [Prince/PG!Kokichi Ouma x Plebeian!reader] © RoseSanae55

Capítulo 31: Relaciones interpersonales

El dragón emitió algunos gruñidos mientras sus grandes ojos de amarillentas retinas se cerraban lentamente y sus alas dejaban de agitarse a la velocidad que mucho antes tenía. Fuyuhiko notó esto al instante, sabiendo que el lagarto necesitaba un descanso. Siberly estaba ya muy lejos del alcance de su vista, pero Mirya no estaba ni cerca de aparecer en la misma. El paisaje mostraba un amplio prado, a lo lejos, un pequeño bosque. Un enorme río de gran caudal corría a la derecha y las altas montañas por el flanco izquierdo solamente dejaban ver un minúsculo fragmento de lo que les seguía en el paisaje, viendo unas manchas azules con reflejos de luz, cualquiera supondría que solo había mar en dicha dirección. El dragón comenzó a descender por orden del de hebras rubio cenizo, permitiéndole finalmente poner sus enormes patas en la tierra y recostarse para descansar.

Entre Fuyuhiko y Nagito se dieron por la labor de montar el pequeño campamento temporal y buscar alimento para la enorme criatura, dejando solo a Mikan, Kokichi, Masaru y ___ con el ser escamoso, a quien la pelimorada no miraba con confianza. El dragón estaba dormitando plácidamente mientras la peli___ se deslizaba por su ala extendida y llegaba exitosamente al suelo. Detrás suyo bajó el de hebras moradas, agarrando a Masaru al momento en que este imitaba sus acciones. Mikan puso más duda y resistencia en descender a tierra, por lo que se tomó su tiempo de hacerlo mientras observaba al pequeño Masaru arrastrar a Kokichi de un sitio a otro, mirando todo con curiosidad y la otra fémina del grupo rebuscaba entre sus pertenencias y equipaje algunos comestibles para preparar algo ligero para todos. ¿Qué acaso todos en aquel grupo tenían una labor? Nagito era el guardaespaldas, Fuyuhiko era el encargado del transporte, Kokichi era el niñero y ___ como la cocinera o algo por el estilo. Pronto Masaru se lanzó sobre esta última riendo mientras le mostraba una flor extraña que acababa de encontrar. El príncipe sintió cierto alivio al ver como su acompañante era capaz de poner al niño bajo control, a él le resultaba algo agotador su exceso de energía.

-¿Cómo se llama esta flor, ___? _preguntó el pelirrojo con curiosidad mientras la mencionada se tomaba su tiempo de ver detenidamente la flor, intentando encontrar su nombre entre sus conocimientos_

-Creo que es una... ílhia...

-¿Una qué?

-Una flor sin aroma. Usualmente las encuentras en cualquier prado.

-¿O sea que no sirve para nada? _cuestionó con cierta decepción el menor, la fémina rió ante su expresión_

-No dije eso, solamente dije que no tiene aroma. También puede anular el aroma de alguien que se aplique una loción hecha con ellas.

-No entiendo...

-Literalmente... Si las trituras y te untas esa pasta en la piel, tu olor desaparecerá del olfato de otras criaturas. Es bastante útil cuando atraviesas bosques andando o te adentras en cuevas.

-¡Entonces sí sirve! ¡Voy a buscar más! _exclamó felizmente el chico mientras salía corriendo y comenzaba a buscar dichas flores por las cercanías_

-No entiendo de dónde saca las energías... _musitó Kokichi, viendo al niño y vigilando que no se aleja de demasiado_

-Es un niño, ¿qué esperaba? Seguro que a su edad también era algo hiperactivo. _dijo ella, mas el contrario movió la cabeza de un lado a otro rápidamente, en señal de negativa_ ¿No? No es lo que me han contado. _bromeó, viendo al chico enrojecer casi inmediatamente_ Era broma, solo lo estaba molestando un poco. Últimamente le noto algo tenso, ¿está todo bien?

-Solo pensaba en los eventos recientes... _habló en respuesta. La peli___ se acercó a él, colocando en sus manos un emparedado muy bien hecho, envuelto con un pañuelo blanco, sabiendo bien que había estado tocando la piel del dragón con sus manos desnudas y sabrá Dios cuántos microbios tendría encima. Además de que el río quedaba demasiado lejos como para lavar allí sus manos. Ella por su parte estaba usando unos finos guantes de cuero como protección para no tocar con sus manos la comida directamente_