A la mañana siguiente reviví como Lázaro. El haber estado descansando durante dos días seguidos me había ayudado a recobrar fuerzas. La presión en el pecho era tan pequeña que casi no la sentía, pero esto sentía que era por culpa de Chan.
Me levanté más o menos pronto y me puse en marcha al edificio con la moto. Pasé por la puerta y me quedé anonadada al ver un montón de periodistas esperando en ella. ¿Habría pasado algo con algún idol?
Pasé de largo y fui directa a la entrada del parking subterráneo para no tener que pasar por enfrente de ellos.
Cuando llegué arriba, la gente que no me saludaba de normal empezó a saludarme inclinando la cabeza. No sabía muy bien por qué pero correspondí a cada uno de ellos
Iba ir a la sala de producción, pero antes quería ir a saludar a los chicos y ver cómo se encontraban después de nuestra salida nocturna. Llamé a la puerta y entré. Como ya se estaba haciendo habitual me recibieron con un gran Luuucyyyy y me acerqué a saludarlos. Algunos de ellos hasta me dieron un abrazo, cosa que agradecí y me extrañó a partes iguales. Supuse que emborracharse juntos crea esos tipos de vínculos.
— ¿Cómo te encuentras? —preguntó Seungmin.
— Mejor, ¿me puse muy mal, verdad? Hay una parte de la noche que tengo en negro —miré de reojo a Chan al decir esto último. Él estaba con una sonrisa de oreja a oreja y soltó una breve risa.
— Bueno, serena desde luego no ibas. Pero no hiciste nada vergonzoso. No te preocupes —me animó I.N.
— La mayoría de vosotros tampoco iba muy sereno —reí mirando a Felix.
— Oi, oi, me caí al suelo porque tú me tiraste —se defendió Felix.
— ¿Te tiré al suelo? -pregunté alarmada.
— Se cayó porque fué incapaz de levantarte. Menos mal que estaba yo ahí -siguió ChangBin haciendo alarde de su fuerza y marcando músculo.
— Espera, ¿eso significa que yo también estaba en el suelo? —me tapé la boca con las manos horrorizada.
— Fue un pequeño tropiezo, pero te levantamos enseguida.
— Antes de reírnos de ti durante un rato —contestó Han. Le miré con los ojos entrecerrados y la boca prieta. Maldito.
— ¡Y me llamaste Binnie!
— ¿¡Qué!?
¿De dónde había sacado el valor para hacer eso?
Creo que el alcohol tuvo algo que ver.
Ah... ya...
— Y a mi Channie —habló por primera vez Chan sin quitar esa sonrisa de la cara.
— ¡¡¿¿Quéééé??!! —El horror iba en aumento.
— No te preocupes, me gustó. Denota confianza —volvió a decir Chan. Yo le miré con ternura, no podía quitarme de la cabeza el Chan's room de ayer.
— ¡Espera! A mi no me llamaste Hannie. Pensaba que yo era el que te caía mejor. ¿Por qué no lo hiciste? —preguntó cruzándose de brazos y enseñando una expresión de cabreo divertida.
— Mira, ni siquiera me acuerdo de llamarles así a ellos. Así que no te puedo dar los motivos de una borracha.
— Bueno, no pasa nada, a partir de ahora llámame oppa.
— No puedo hacer eso.
— No te preocupes, sé que no es por interés romántico aunque, con esta cara -puso sus manos alrededor de sus mofletes y sonrió de manera sensual— sé que es difícil contenerse.

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Sin Remedio
FanfictionCuando dos personas se atraen, no pueden evitarse. Lucy estaba emocionada por ser la nueva directora de los MV de Stray Kids. En cuanto conoció a Bang Chan, sabía que algo no iba bien en su corazón, pero su mente le decía otra cosa. La profesionalid...