Rubén y yo nos quedamos despiertos jugando con su computadora hasta las 3 a.m. Mientras que Lucía seguía guardando sus cosas. Y Mangel, bueno, Mangel aprovecho para seguir durmiendo.
Cinco minutos más tarde Rubén se encargó de despertar a Mangel. El vuelo salía a las cinco, pero teníamos que ir una hora antes para organizar todo bien para viajar. Salimos a las 3:10 a.m. hacía al aeropuerto.
Llegamos al aeropuerto quince minutos después, aproximadamente, y fuimos, bueno, Lucía y yo fuimos, hacía la parte donde se compran los boletos, y nos tuvieron ahí casi una hora. Pero dentro de media hora, podíamos ya subirnos al avión.
-Rubén. –Lo llame.
-¿Qué pasa? –Me pregunto acercándose.
-¿Me acompañas a comprarme algo? –Le señale la tienda de dulces, se rió y asintió.
Agarre la mayor cantidad de dulces posibles, y un agua para Lucía, yo cuido la dieta de mi mejor amiga. Friendship goals.
-Gracias. –Dijo Lucia mientras agarraba la botella de agua.
Minutos más tarde pudimos abordar el avión. Esta vez me pude sentar al lado de Rubén. Mientras que a Lucía le toco con Mangel. En todo el viaje Rubén edito vídeos, mientras que yo dormí. Era la primera vez que dormía en un vuelo todo el viaje. Pero estaba cansada. Y quería estar bien despierta para poder soportar todo el día de hoy. Aunque seguro íbamos a ir a dormir al hotel antes que nada.
Después de tres horas de viaje, pudimos aterrizar. Casi fuimos los últimos en bajarnos, fuimos directamente a buscar nuestras valijas.
-Ese se parece a Ash. –Dije viendo a una persona demasiado parecida a Ash. –Oh... -Era él.
-¡MI BEBÉ! –Grito Lucía.
Corrió hacía donde estaba Ash parado con la vista fija en nosotros. La mejor parte de eso, fue la parte en que Lucía se tiro encima de él haciéndolo caer en el piso.
Corrimos los tres hasta donde los dos estaban, todavía en el piso, y los ayudamos a pararse.
-¿Qué haces acá? –Pregunto Lucía sin dejar de abrazarlo.
-Te extrañaba, y me dije a mi mismo: Oh Ash, si tanto la extrañas, ¿por qué no vas con ella? –Imito a dos personas a la vez. –Y acá estoy. –Le dio un beso.
-Mucho amor, basta. –Dije yo separándolos. –Vamos al hotel, tengo mucho sueño. –Dije bostezando.
-¿Todavía? –Se rio Rubén. Asentí mirándolo confundida.-Dormiste todo el vuelo.
-Pero, pero, todavía tengo sueño. –Hice puchero. –Vamos. –Rubén me abrazo por el hombro y empezamos a caminar.
Caminamos hasta el auto que nos iba a llevar al hotel. En el camino Rubén me conto que ahí iba a estar Samuel, Guillermo y Frank. Y eso aumento mis ganas de conocerlos. Estaba ansiosa, demasiado. O sea, el E3, conocer a más amigos de Rubén y Mangel. En cualquier momento iba a explotar.
Al llegar al hotel, en la entrada estaban Luzu y Alex sentados en la recepción, al parecer, esperándonos a todos. Nos saludamos, y subimos, vimos que habitaciones teníamos, y era casi como en Cancún. Sólo que ahora era Mangel, Rubén y yo. Y en una aparte Lucía con Ash, aunque antes era para ella sola, ahora la iba a tener que compartir.
Organizamos nuestras cosas, y bajamos en donde todos, aclaro, todos nos esperaban para salir a recorrer la ciudad. Y después íbamos a ir al YouTube Space.
Lucía llevaba la cámara encima para poder grabar más tarde ahí. Fuimos a un bar a comer todos juntos. Sí, éramos once en un bar. Todo un record para mí. Jamás había salido con tanta gente.
-Mañana empieza el E3. –Dijo Samuel. –Y esta noche queríamos ir a un club.
Esta es la parte en la que me deprimía tener solamente 18 años y estar en Los Ángeles. Todos estuvieron de acuerdo con aquello. Excepto Ash y Lucía que ni siquiera prestaron atención, demasiado ocupados comiendo pizza como para eso. Aunque ellos dos tampoco podían, respectivamente 19 y 20 no los hacía más mayor que yo.
-Agustina. –Me llamo Guillermo. -¿Qué se siente ser la novia de Rubén? –Me pregunto sonriendo. Parecía chino.
-Bueno se sient... -Rubén me tapo la boca con la mano.
-Yo respondo por vos. –Dijo Rubén. –Se siente genial, y dice que es muy afortunada de tener a alguien tan sexy como yo a su lado. –Se escucharon algunas risas.
Al terminar de comer, fuimos al YouTube Space, aunque no todos, Lana y Luzu decidieron ir más tarde, y fueron a recorrer la ciudad. Con Lucía grabamos algunas partes de todo lo que es aquel lugar. Con algunas participaciones extras de la cara de Rubén metiéndose apropósito enfrenté de la cámara, aunque no fue el único. Alex hizo una gran actuación, creo, junto a Mangel en la parte de la prisión que se encontraba ahí mismo.
Al último lugar que fuimos fue a la maquina en donde se podían agarrar cosas. Esta vez había algunos peluchitos de YouTube. Cada uno de nosotros tenía una ficha, excepto Ash que al no ser youtuber ni se inmuto en ir a pedir una. Lucía saco un peluche, y me hizo el enorme favor de sacar uno para mí. Y después, Rubén saco un poster, el cual utilizo para pegarme en la cabeza al negarle mi oso, Mangel saco una mochila, Alex un peluche al cual presumió a todo rato. En la salida nos encontramos a Luzana que ya había entrado y visto todo, en menos tiempo que nosotros, y con Samuel, Frank y Guillermo.
Nos fuimos todos al hotel. En donde cada uno se empezó a preparar para salir. Menos nosotros tres. Somos unos niños en una ciudad llena de maldad.
-Mi nena solo tiene 18 y no puede ir con nosotros. –Me acaricio el pelo Rubén mientras se burlaba de mí.
-Ja-ja. Que gracioso. –Le saque la lengua.
-Si queres no voy. –Dijo sentándose al lado mío.
-No, anda, con Ash y Lucía vamos a hacer algo los tres, si es que ellos no terminan encamados y yo ahí solita. –Me reí sola.
-Está bien, voy a ir bajando. –Me dio un beso en los labios. –Te amo.
-Yo más. –Vi cómo se iba y agarre mi piyama para ir a la habitación de Ash y Lucía.
Ash fue el que me abrió, y corrí hacía el baño de la habitación para cambiarme. Lucía también estaba en piyama, excepto Ash, todos sabíamos que dormía sin remera, pero esta vez tenía una puesta.
En dos horas lo único que hicimos fue editar el vídeo, contestar algunos tweets, ver una película de terror, hablar los tres. Hasta que mi celular vibro, era una mención de Rubén, que contenía una foto. Era el con una cerveza y Mangel al lado, y como descripción tenía: Para la envidia de @agusgarrix.
Que gracioso era.