veintiocho

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Sintió algo pesado sobre él. Estaba acostado de espaldas y algo o alguien le pesaba. Su brazo derecho estaba entumecido por el peso. Louis respiró hondo y abrió los ojos, miró hacia abajo para ver un brazo alrededor de su cintura.

Le tomó un tiempo darse cuenta de que quien se encontraba ahí, era su esposo.

Harry estaba encima de él; cubriendo a Louis con su cuerpo. Sus pies enredados entre los suyos. No sabía cómo sentirse al respecto. Estaba cómodo, sí. Pero no se sentía bien con que fuera Harry el que estuviera con el.

No sabía cómo es que habían terminado juntos si Noah se había quedado entre ellos.

Louis se removió un poco de su lugar para poder alcanzar su teléfono y ver la hora, Harry se aferró a Louis como si temiera que Louis se fuera en cualquier momento.

Cómo pudo se separó de el y alcanzó su teléfono. Ocho con cuarenta minutos "mierda", pensó Louis, tenía que ver a  Sam nueve en punto en su casa.

Trató de levantarse de nuevo, pero Harry lo había tomado con más fuerza ahora.

— ¡Mierda Harry!, Muévete, se me ha hecho tarde.— gritó Louis quitando la mano de Harry de su cintura.

Harry despertó debido a el alto tono de voz que estaba usando Louis. Se movió hacia un lado y trato de acostumbrarse a la luz que entraba por la venta de la habitación.

— ¿Q-qué hora es? — preguntó Harry sentándose sobre la cama.

— Casi nueve de la mañana. De seguro llegaré tarde. — dijo Louis buscando desesperadamente algo decente entre su ropa.

— ¡¿Nueve?! es muy temprano aún, regresa a la cama. Lo que sea que tengas que hacer lo puedes hacer otro día, hoy es sábado.

— Ni creas que volveré a dormir contigo, lo hice por Noah, quien se supone debería de estar aquí. — dijo Louis tomando sus cosas y dirigiéndose a el baño de su habitación.

— Vale, entiendo. ¿Pero qué es tan importante para que tengas que salir tan temprano en sábado? — preguntó Harry levantándose.

— Tengo una cita. — dijo Louis dejando a Harry solo sin saber que responderle.

Louis tomo una ducha de 5 minutos, se tuvo que cambiar en el baño, no quería hacerlo frente a Harry en la habitación.

Al salir vió que Harry ya no estaba más en la habitación. Camino al cuarto de Noah para avisarle que tendría que salir.

— Cariño, ¿Estás despierto? — preguntó Louis tocando la puerta.

No recibió respuesta, asi que decidió abrir la puerta. Noah estaba sentado en su cama con Harry frente a él. Su hijo reía a todo pulmón debido a que Harry le había contado uno de sus malos chistes. Ambos voltearon a ver Louis al mismo tiempo.

— Lamento si interrumpo algo, solo venía a avisarle a Noah que saldré.— dijo entrando a la habitación.— tal vez regrese un poco tarde. No quiero que salgas ni invites a nadie a casa, quedó pizza de ayer para desayunar, de todos modos te dejo mi tarjeta por si quieres ordenar otra cosa.— dijo entregándole su tarjeta a Noah.

— No te preocupes, papá Harry dijo que me llevaría a comer con él. — dijo Noah.

— De acuerdo, confío en ti.— dijo dejando un beso en la frente de Noah.— Me voy se me hace muy tarde.— dijo caminando a la puerta.

—¡Hey!, ¿Yo no recibiré un beso también? — preguntó Harry frunciendo los labios.

Louis rodó los ojos y salió de ahí antes de arrepentirse y caer.

Subió a su auto y comenzó a conducir, sabía que iba bastante tarde, esperaba que a Sam no le importara.

Sus manos apretaban el volante y su vista estaba fija en el camino. La dirección de Sam era en uno de los lugares más exclusivos, siempre había sabido que a Sam el gustaban los lujos, otra de las razones por las que habían dejado de ser amigos mucho tiempo.

En su mente viajaban cientos de pensamientos, esperaba poder olvidarse de todo por un rato mientras pintaba.

Al llegar a la residencia de Sam, hizo sonar el timbre. Unos segundos después un hombre mayor le abrió la puerta, dejándolo pasar.

— El señor Fender lo está esperando en la sala de estar.— dijo el señor dirigiendo a Louis. Este asintió en agradecimiento.

Al llegar a la sala de estar, Sam se encontraba sentado en uno de los sillones, tomando una cerveza, y sin camisa.

Louis tragó saliva, Sam se veía muy bien. No era un secreto para nadie que ellos dos habían tenido historia cuando eran jóvenes, pero todo termino cuando Louis conoció a Harry. Y ver a Sam así, lo ponía en una situación muy difícil.

TRAMPADonde viven las historias. Descúbrelo ahora