Darcy estaba emocionada por qué sus pequeños tíos irían a su casa a jugar con ella.
Noah le aconsejaba a Louis que saliera de vez en cuando a divertirse, que fuera a un bar, que saliera de compras o simplemente que pasará tiempo pintando.
Louis en ocasiones salía a algún bar distraerse un poco, no era nada fácil tener dos pequeños niños en casa.
Otras veces, Sam llamaba a Louis, lo cual no era tan común, su "compromiso" seguía en pie, pero después de cinco años de estar comprometidos, no habían hablado nunca sobre retomar lo suyo y casarse.
Para Louis era mejor así, sabía que si quería estar con alguien alguna noche, llamaba a Sam, y el también estaba de acuerdo si era al revés.
Freddie y Aidan querían mucho a Sam, aunque el fuera un poco "gruñón", como ellos decían.
Darcy estaba feliz de pasar el fin de semana con Noah, los demás días estaba con Bear y su molesto novio. A Darcy no me gustaba el nuevo novio de su padre, era grosero y en ocasiones gritaba mucho. Alguna vez llegó a ver cómo este le daba una cachetada a su papi, pero no dijo nada, ya que su mismo padre se lo pidió.
En cambio, cuando Noah y Bear estaban juntos, todo era lindo. Sus padres siempre estaban felices y se querían mucho, hasta que apareció el novio de Bear y terminaron.
Eran casi las cuatro de la tarde cuando la puerta de la casa sonó. Darcy corrió a ver de quién se trataba. Noah caminó detrás de ella.
—Papá, pasa, puedes dejar las cosas de los niños en su cuarto.— sí, Freddie y Aidan tenían una habitación para ellos en casa de Noah.
Louis pasó a la casa, seguido de los dos pequeños niños vestidos de ositos. Noah sonrío al saber que eran los mismos trajes que Harry había comprado. Por alguna razón Harry los había comprado enormes, ahora sabía que no había sido una equivocación, el destino sabía que algún día serían ocupados por los pequeños niños.
—¿Te quedas a cenar?.— preguntó Noah cuando Louis regresó.
—Me gustaría, pero Sam me está esperando en el auto.— dijo Louis.
—Vale, entonces te veo mañana.— dijo Noah despidiendo a Louis.
Noah no se atrevía a decir lo que pensaba de Sam para no iniciar una discusión con Louis. Noah amaba estar con sus pequeños hermanos, pero las razones no se le hacían muy buenas, él veía como los pequeños niños adoraban a Sam, y le dolía ver qué Sam no los miraba con la misma adoración.
Varias veces había pensado en decirle a Harry lo que Louis había estado ocultando los últimos cinco años, pero cada vez que estaba a punto de hacerlo, se repetía a sí mismo que si su padre había decidido no hacerlo, era por qué sus razones tenía.
Decidió seguir con lo que están haciendo antes de que Louis llegara.
Mientas los más pequeños se encontraban jugando en la habitación de la pequeña.
Darcy tenía a ambos niños sentados mientras los maquillaba, estos no decían nada. Ellos amaban ver a la pequeña niña feliz, aparte de que les agradaba verse en el espejo al final del juego, aún que Sam les decía que eso no era algo que los niños debían hacer, ellos no le tomaban mucha importancia.
—Dar, ya me aburrí,¿Y si mejor jugamos otra cosa?.— dijo Freddie, fastidiado de jugar al salón de belleza.
—Deja que termine Fred, después podemos jugar a lo que tú quieras.— dijo Darcy pasando una pequeña brocha por las mejillas del pequeño rubio.
—¡No es justo, él está quedando más bonito que yo!.— dijo Aidan cruzando sus bracitos.
—Es que yo soy más bonito que tú.— dijo Freddie pinchando la mejilla de su hermano con su dedito.
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TRAMPA
FanfictionLouis se encontraba en la habitación con las luces apagadas, esperando a que Harry llegará. Estaba acostado en la cama, solo tenía unas pequeñas bragas y un antifaz puesto. Sabía que si Harry llevaba, le iba a doler muchísimo, pero se quiso arriesga...