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Louis le mostraba a sus hijos el álbum que había llenado de fotos a lo largo de toda su vida. Los pequeños miraba atentos todas y cada una de las fotos, y escuchaban las historias que su padre contaba.

Louis les platicaba cada detalle de cada foto que había en ese álbum, desde las fotos que tenía con Ernest cuando eran niños, hasta las ecografías que aún tenía de cuando estuvo embarazado por primera vez.

—¿Y ese quién es papi?— preguntó Aidán señalando una pequeña foto.

—Son Harry, Noah y yo. Ese día celebramos los tres solos, el cumpleaños número tres de Noah.— dijo Louis tomando la foto entre sus manos.

—Noah se ve muy chistoso vestido de rana.— dijo Freddie riendo.

—El mismo pidió ese traje, no dejo de llorar hasta que Harry se lo compró.— dijo Louis riendo al recordar aquel día.

flashback

—Pero papá, yo quiero ese.— decía Noah mientras jalaba el pantalón de Harry.

—Pero el de perrito es más lindo.— decía Harry, no es que fuera más lindo, sino que era más barato.

—Mami Lou, yo quiero ranita!— dijo Noah mirando a Louis.

—Si tu padre dice que quiere llevar el de perro, ese llevaremos.— dijo Louis apoyando a Harry.

Noah comenzó a llorar, normalmente Harry hacía todo por complacer a Noah, era su forma de compensar el tiempo que no pasaba con él. Pero justo aquel día había tenido que hacer unos gasto extras, por lo cual estaba corto de dinero.

—Vamos Noah, no llores amor, te juro que el de perrito es más lindo.— dijo Harry buscando ayuda por parte de Louis.

—Pe-pero yo quie-ro ra-ranita.— decía Noah entre hipidos.

—De acuerdo, llevaremos el que tú quieres.— dijo Harry tomando a Noah en brazos.

La vendedora que se encontraba atendiéndolos, tomo el traje de ranita y camino junto a ellos hasta el mostrador.

—Son veinte euros ¿Pagará con tarjeta o en efectivo?— dijo la chica entregándoles su compra en una bolsa.

—En efectivo, tenga.— dijo Harry tomando £20 de su billetera.

Salieron de la tienda y se sentaron en una banca.

—¿puedo probar ahora?— preguntó Noah abriendo la bolsa de la tienda.

—Si pequeño, ¿Quieres ayuda?— preguntó Louis al ver qué Noah intentaba torpemente sacar el trajecito de la bolsa.

—Yo puedo solito, papá dice soy niño grande.— dijo Noah rompiendo la bolsa logrando sacar el trajecito.

Al final Louis sí tuvo que ayudar a Noah, aunque esté no quería.

—¿Y bien bebé?, ¿Qué quieres hacer primero?, podemos ir a comer primero y después ir al cine o al revés.— preguntó Harry a Noah.

—¡Cine!— gritó Noah alzando sus manitas.

Louis tomó a Noah en brazos y caminaron al cine. Jamás se imaginó que se sentía tan bien tener una salida familiar. Amaba la forma en la que Harry consentía a Noah, realmente amaba a ese hombre.

Habían decidido ver "Cars" a petición de Noah.

Decidieron sentar a Noah en medio de Harry y Louis. Aunque a la mitad de la película, ambos se habían arrepentido, querían estar uno junto al otro y abrazarse como cuando eran solo novios.

TRAMPADonde viven las historias. Descúbrelo ahora