TRAMPA

cincuenta

 Harry llegó a casa de Louis junto a Ernest.

—Voy a buscar a Josh, hablas con Noah y te vas, yo luego hablaré con Louis.— dijo Ernest dejando a Harry afuera de la habitación de Noah. No sabía así era correcto entrar, no sabía ni como comenzaría. Sabía que cualquier cosa que dijera no sería suficiente para que Noah le creyera.

Si él no fuera él y no supiera cómo pasaron las cosas, no se creería.

Estaba indeciso en sí, debía pasar, o tocar la puerta antes. Mientras se decidía en que hacer escuchó que Noah no estaba solo ahí adentro, quería escuchar un poco solo para saber si se trataba de Louis.

—Y pues ellos ya no tuvieron más hijos y a estas alturas no creo que lo tengan. Así que talvez podríamos usar alguno de esos nombres para el nuestro.— escuchó Harry que decía Noah.

—Esos nombres son muy hermosos, ten por seguro que le pondremos alguno de ellos.

Harry quedó atónito, había escuchado claramente toda la plática de Noah con quien fuera que se encontraba adentro. No sabía si estaba malinterpretando las cosas, pero no se quedaría con la duda.

Abrió de golpe la habitación haciendo de los dos chicos dentro se sobrecogieran, necesitaba una explicación. Pero antes él creía deber una también.

—Papá, ¿Qué haces aquí?.— preguntó Noah poniendo a Bear detrás de él.

—Yo... Quiero hablar contigo, ustedes dos.— dijo Harry señalando a los menores.— Me deben explicar de que hablaban. Pero primero quiero explicarte todo.— dijo tomando una silla del escritorio de Noah y sentándose después.

—No creo que me debas de explicar nada a mí, de todas formas lo que digas sé que no es cierto. ¿Por qué no solamente dices la verdad y dejas de actuar como la víctima aquí?.— dijo Noah sentándose junto a Bear en la cama. Bear se sentía muy incómodo al estar en esa situación.

—Eso quiero hacer, te diré la verdad. Solo déjame hablar.— dijo tomando las manos de Noah.— Sé que ahora piensas que soy un completo idiota y que talvez les falle de nuevo, pero lo que ustedes vieron no es lo que parece. Yo solo iba por una cuestión de trabajo, el tipo confundió las cosas y me besó. Solo eso de verdad.

—Dijiste que hablarías con la verdad, y yo lo único que escucho es que quieres tapar lo que hiciste con un "malentendido".— dijo Noah haciendo señas con sus dedos.

—Perdón que me meta, pero creo que tu papá está diciendo la verdad. Tú y yo sabemos como es Conan contigo, supongo que de algún lado lo ha aprendido.— dijo Bear.

—Bear, por favor amor, no te metas en esto.— dijo Noah a su novio.— Y aunque te diga que te creo, eso no cambiará nada. Mi papá no te va a perdonar y no creo que te dé una última oportunidad.

—Con él, pienso hablar después, solo quería que supieras como fueron las cosas... Y también quiero que me expliquen de que hablaban antes de que entrará, e igual quiero la verdad.— dijo Harry mirando seriamente a los chicos.

—Oh no era nada solo bro....— decía Noah siendo interrumpido.

—Estoy embarazado de Noah.— dijo Bear rápido y cerrando sus ojos esperando un regaño.

Noah se puso completamente rojo. Harry solo lo miraba sorprendido, no estaba preparado para una noticia de ese tipo. Su hijo tendría un hijo.

—Papá, te juro que yo pensaba decirt...— dijo Noah.

—¿Cuánto tiempo?.— preguntó Harry a Bear interrumpiendo a Noah.

—Dos meses.— dijo agachando la cabeza.

—¿Fueron ustedes los que usaron mi tarjeta?.— preguntó Harry.

Ambos asintieron. Harry de alguna forma sabía que tenía que darle un regaño o alguna llamada de atención a Noah y Bear por haber sido irresponsables al momento de tener relaciones, aunque él ya había hablado de eso con Noah; pero igual sabía que las cosas ya estaban hechas y no había mucho por hacer, tenía que apoyarlos ahora, como a él le hubiera gustado ser apoyado por sus padres.

—Supongo que no hay ya nada que hacer, lo único que les queda es decirle a los padres de Bear y a Louis. No pueden ocultarlo toda la vida.— dijo Harry a punto de salir de la habitación.

—¿Tú nos podrías ayudar?.— preguntó Noah.1

—Me gustaría, pero eso les corresponde a ustedes... Probablemente, iremos a cenar a casa de Bear mañana, en el trabajo nos dieron una noticia y queremos dárselas, pueden aprovechar el momento.— dijo Harry.— Si necesitan algo, solo llámenme y no solo hagan las cosas sin consultarme.— dijo Harry saliendo de ahí y cerrando la puerta detrás de él.

Noah y Bear se esperaban un enorme regañó, pero Harry había sido muy comprensivo con ellos.

Harry caminaba a las escaleras para salir de la casa de Louis, cuando escucho que alguien discutía dentro de la habitación de Louis.

Se acercó a la puerta solo para asegurarse de que todo estuviera bien y escucho a Ernest que hablaba dentro.

—Por lo menos deberías escucharlo, no pierdes nada haciéndolo.— dijo Ernest.

—No lo voy a escuchar, no insistas. Tú hiciste tu vida como quisiste, déjame hacer la mía.— dijo Louis.— Además, no pienso seguir con ese idiota, sé muy bien lo que vi, y no lo voy a perdonar aún que me pida que lo disculpe de rodillas.

—¿¡Estás escuchándote!? Es tu esposo, no puedes simplemente separarte de él, y aparte tienen un hijo de por medio, no estás pensando en él.

—Ya no lo será más, ya he conseguido un abogado para que me ayude con el divorcio.— dijo Louis terminando la discusión.

Harry por fuera escuchó las palabras de Louis. Estaba pensando en divorciarse de él. Y al parecer no había nada que él pudiera hacer ya.