sesenta y cinco

201 9 0
                                    


Noah había escuchado a Louis vomitar la noche anterior. Cuando lo hizo bajo a ver qué ocurría. Al final Louis solo le dijo que había tomado un poco de más.

Ahora estaba terminando de alistarse para ir a la escuela. No quería ir ese día, aunque ya había faltado el día anterior, quería pasar su día completo escotado de la cama viendo televisión y jugando con su cachorro. Pero Louis descartó la idea de inmediato.

Sus abuelos se irían ese mismo día. Tenían que regresar a Londres a terminar los últimos arreglos para la operación de Des.

Louis lo había estado "evitando" toda la mañana. Noah temía que fuera por la noticia de Bear. Se sentía triste, pensaba que Louis lo tomaría mejor que Harry, pero había sido lo contrario.

También las palabras que uso Louis al enterarse, lo habían lastimado demasiado. Él no creía que su hijo sería un error en su vida. Al parecer para Louis así había sido.

Cuando por fin estuvo listo, salió de su habitación a buscar a Louis. Él había dicho que lo llevaría.

Cuando estaba bajando las escaleras para ir a buscarlo al primer piso, Louis hablaba por teléfono mientras anotaba algunas cosas en una libreta.

—Está bien doctor, entonces espero su llamada mañana para mis resultados.— decía Louis cerrando la libreta que se encontraba frente a él.

Noah al escuchar eso se alarmó. Louis había ido al médico, lo cual sabía que odiaba. Le preguntaría en el auto que ocurría.

Bajó las escaleras y Louis notó su presencia.

—¿Estás listo?.— preguntó Louis.

—Si, vamos.— dijo Noah sonriendo.

Ambos salieron y subieron al auto. Louis manejaba perdido en sus pensamientos. Noah lo miraba directamente. No había notado nunca las ojeras debajo de los ojos de su padre, tampoco que estaba más delgado de lo normal.3

Había estado los últimos días interesado en otras cosas que no había notado en lo viejo que se estaba haciendo su padre.

—¿Todo bien?.— preguntó Louis al notar la mirada de Noah sobre él.

—¿Te sientes bien?.— preguntó Noah esperando que Louis pudiera contarle que pasaba.

—Si, ¿Por qué?.— preguntó Louis sin quitar la mirada del camino.

—Bueno, yo... Escuché que antes de salir estabas hablando por teléfono, mencionaste algo de unos resultados del médico, solo quería saber si estabas bien.

—Estoy perfecto, solo me he sentido un poco extraño los últimos días y no está de más hacerme unos exámenes médicos. No te preocupes por eso, estoy bien.— dijo Louis removiendo el cabello rizado de Noah.

Noah solo asintió y no dijo nada por el resto del camino. Hablaba por mensajes con Bear. No iría a la escuela ese dia, según el había llegado una vista inesperada y era imposible para el ir. Noah esperaba que todo estuviera bien.

—En la tarde pasaré por ti, tengo algo que decirte, posiblemente Harry ya hablo de esto contigo, pero quiero hacerlo yo también.— dijo Louis al llegar abla escuela.

—De acuerdo, te veo en la tarde.— dijo Noah quedándose en su lugar.

—¿No piensas bajar?.— preguntó Louis viendo que Noah no pensaba salir del auto.

—No me has dado mi beso ni me has deseado buena suerte.— dijo mirando a Louis.— Da igual, nos vemos más tarde.— dijo Noah saliendo del auto al ver qué Louis no pensaba hacerlo.

No era que Louis no quisiera, su mente estaba en otra cosa. El día siguiente por la tarde sería la exposición por la que había estado trabajando mucho tiempo. Y según Sam, era buena idea ser presentados como pareja. Así el proyecto funcionaria de mejor forma.

Por la tarde pensaba llevar a Noah a cenar con él y Sam, de esa forma no le tomaría de sorpresa la noticia al día siguiente.

Solo esperaba que Harry con la noticia del divorcio, no se le ocurriera aparecerse por la exposición. Era lo último que quería.

Harry por su parte se encontraba en su casa despidiendo a sus padres. Deberían regresar a Londres lo más pronto posible. Harry estaba muy feliz de haber podido arreglar sus problemas con ellos y había quedado en ir a Londres la semana siguiente para estar acompañando a su padre antes y después de la operación.

—Me encantaría poder acompañarlos desde ahora, pero tengo que consultarlo con mi jefe.— dijo Sam abrazando a su madre.

—Si necesitas algo, llámanos, las puertas de nuestra casa están abiertas para cuando quieras visitarnos.— dijo Des saliendo de la casa.

—Tengan por seguro que los tomaré en cuenta siempre.— dijo Harry ayudando a su madre con las maletas.

Cuando acomodaron las cosas de los padres de Harry en su auto, fue que Anne recordó que debían decirle a Harry sobre la visita de Louis el día anterior.

—Antes de irnos, debemos entregarte algo.— dijo Anne.— Ayer que Louis vino a dejar tu maleta... el dejo unas cosas que debes leer.

—Tienes que saber que tienes todo nuestro apoyo.— dijo Des entregándole la carpeta con los papeles a Harry.

Él los tomó y comenzó a leerlos uno a uno tranquilo.

Sus padres miraban con atención cada gesto que se formaban en la casa de Harry, podían notar su tristeza a cada segundo que pasaba.

Al final de revisar todos los cerró la carpeta y les dio una sonrisa ladina.

Ellos abrazaron juntos al más pequeño de sus hijos y escuchaban el leve llanto de este. Lo único que pidieron hacer es susurrarle algunas palabras de aliento y apoyo.

Harry sentía que se trataba del final de su vida...

TRAMPADonde viven las historias. Descúbrelo ahora