Limbo - Lee Know

Parte 12

POV EUNJI

Tallo mis ojos por la luz que se filtra entre las cortinas e inconscientemente me volteo y reparo en la realidad de que estoy sola en la habitación, no recuerdo la última vez en la que mis constantes pesadillas no estuvieran presentes y el hecho de que Minho no esté a mi lado me deja un vacío que no debería sentir, no cuando estoy con otra persona.

Intentó no prestar atención a la repentina decepción que me embargó, todavía se reproducía nuestra conversación en mi mente, el hombre que vi antes era diferente al Minho de ahora, de una forma desconcertante, siempre lograba confundirme y odiaba esa sensación, de no saber que esperar, era de todo menos predecible.

Busco entre mi bolso la ropa que usaría, después de una ducha y algo de maquillaje, bajo para encontrarme con todos. Contuve el nerviosismo al verlos en la sala, pero enseguida sentí su ausencia, la que sentía a cada momento. Nadie lo mencionaba, como si él nunca hubiese estado allí hace sólo unas horas ¿Y si lo soñé? No, no era posible.

Me mordería la lengua antes de preguntar por Minho en voz alta.

Al cabo de unos minutos en que intenté prestar atención al hilo de la conversación que se centraba prácticamente en charlas casuales entre Jisung y Hyunjin, una mano se posa en mi hombro. Me sentí completamente culpable por no reparar en el hecho de que Chan tampoco estuvo allí desde el principio, acababa de llegar y no me di cuenta, cuando él sólo me brindaba una reluciente sonrisa como siempre.

Esto no puede ser, no de nuevo.

- ¿Me puedo sentar a su lado, señorita Kim? - intenta juguetear, pero a mi mente sólo viene el recuerdo de él, en quien no debería estar pensando.

- Claro que sí - respondo intentando sonar relajada cuando mi corazón se sacudía en mi pecho.

La comida transcurrió con normalidad entre la mayoría de los presentes allí, excepto por mí. Chan estaba más atento que se costumbre, en ocasiones me observaba con atención, impidiéndome pensar en otra cosa que no fuera la enorme culpa que no me abandonaba desde que abrí los ojos por la mañana.

- ¿Qué ocurre? - cuestione más de una vez su tendencia a quedarse mirándome mientras probaba bocado y él sólo negaba en respuesta, sonriendo.

Ya la tercera vez que lo atrapé comprendió el mensaje, era demasiado obvio que le pasaba algo, pero su expresión no revelaba nada más que la amigable sonrisa de siempre.

Al cabo de los minutos me sentí decepcionada por el hecho de que nadie parecía extrañar la presencia de Minho, hasta que Yeji a mi lado se acerca y susurra en mi oído para que nadie más nos escuche.

- ¿Todo bien?

- Sí - respondo - por supuesto.

Mordí mi lengua para no decirlo.

- Genial, sólo quería asegurarme, luces algo inquieta.

- Estoy bien, gracias.

- Ya sabes que, si necesitas algo, me dices - esta me guiñó un ojo e inmediatamente pensé que era el momento adecuado.

Observé alrededor y todos parecían entusiasmados en la historia de Migyung y cómo se ha adaptado a la maternidad estos meses, incluso Chan parecía divertido con sus anécdotas.

- Yo me preguntaba... ¿Dónde está... eh, Minho? - Yeji no tendría que saber nada de lo que hubo entre nosotros, no era sospechoso para nada, pero mi cuerpo parece creer lo contrario cuando sentí mi rostro arder de vergüenza la que se intensificó aún más cuando ella lo notó y sonrió antes de responder.