58.
Tadashi Yamaguchi
Fushiguro me levantó del suelo, tirándome del cabello. El dolor físico no se comparaba con el tormento que sentía en mi corazón.
—¡Maldito, asesino! ¿Cómo te atreves a matar a Yuji?— me gritó, con sus ojos llenos de odio.
Apenas podía respirar, pero encontré las fuerzas para responder.
—Se lo merecía.
Su mirada era más afilada que cualquier cuchillo que haya utilizado, cortante y despiadada. Sentí que cada segundo bajo su mirada me desgarraba más y más.
En ese momento, una voz resonó en la habitación, autoritaria y firme— No toques lo que es mío.
El agarre de Fushiguro se aflojó, y al levantar la mirada, vi a Keiji entrar en la sala junto a Bokuto.
—¿Dónde has estado?— preguntó Yuta sonando cansado.
—Me estaba encargando de la limpieza— respondió Keiji sin perder la calma.
—¿Quién ha fallecido?— preguntó Mai con indiferencia.
—Nobara está muerta, al igual que Miwa.
Maki gritó de rabia y sacó su lanza, apuntándola al cuello de Keiji— ¡Eres un bastardo! Si fue tu culpa te juro que te asesinaré.
Keiji no se inmutó— No fui yo quien mató a tu novia, sino Miwa. Ella nos traicionó y tuve que acabar con ella luego.
—Hay que terminar con esto de una vez por todas— dijo Fushiguro. Abrió un armario y sacó un arma, decidido— Debemos deshacernos de aquellos que rodean el edificio y luego con los invitados.
—No autorizo eso— protestó Keiji.
—No estás al mando— replicó apuntándole con el arma— Vengaré a Itadori y a Nobara, y no te entrometas.
Luego, Fushiguro se dirigió a Maki y Mai, ordenándoles que lo siguieran. Las mujeres se miraron entre sí y lo siguieron desapareciendo por el pasillo.
Keiji le hizo una seña a Bokuto, indicando que se sentara junto a mí.
—Quédense aquí— ordenó— Voy a averiguar qué hará Fushiguro— Miró a Yuta y Toge— Vigílenlos.
Me volví hacia Bokuto, buscando un atisbo de esperanza luego de que Keiji se fuera.
—¿Qué has visto?— pregunté en voz baja.
—Keiji me explicó todo. Tráfico de drogas, trata de personas, prostitución, venta ilegal de armas, lavado de dinero, extorsión, robos... es mucho peor de lo que pensábamos.
Sentí un nudo en el estómago.
—Necesito advertirle a nuestro grupo, pero no tengo forma de comunicarme.
Señaló con la mirada hacia Yuta, que tenía una radio en su bolsillo.
—Si logramos quitársela, tendremos una oportunidad.
—Shoyo tiene un arma— dije tratando de mantener la compostura— Pero...
—¿Dónde está Shoyo?
Señalé hacia el cuerpo sin vida de Shoyo, luchando contra las lágrimas. Bokuto siguió mi mirada y su expresión se transformó en una mezcla de tristeza y desesperación. Sus ojos reflejaban el dolor que ambos sentíamos.
—No puede ser...— murmuró bajando la mirada— ¿Cómo puede estar pasando esto...? Dios...
—Debemos actuar lo antes posible— dije con la voz temblando— No puedo perder a nadie más.
—Yo iré por la radio. Después de todo, no tengo nada que perder.
Observé cómo se preparaba, sintiendo que cada segundo contaba.
La tristeza y la rabia se mezclaban dentro de mí, impulsándome a seguir adelante.
No podía permitir que la muerte de Shoyo fuera en vano.
Autora:
Buenass.
Lamento que sea tan corto, es que no quería dejarlos sin actualización.
Creo que mañana escribiré algo más largo.
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Partners in crime// Tsukiyama/kagehina
Teen Fiction"Nunca nos llevarás vivos Juramos que la muerte nos separará Llamarán a nuestros crímenes una obra de arte."