XIX

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Tatiana

-you can go now,(ya se pueden ir) - termino de hablar el maestro.

Comencé a recoger mis cosas, hoy no tenía nada que hacer, pero cesar dijo que pasaría por mi.

Como va lo nuestro, pues...

*Nuestro Tiempo Juntos*

Desde que César entró en mi vida, todo ha cambiado. Nuestras salidas han sido inolvidables, llenas de risas y pasión.

Recuerdo nuestros paseos por el parque, disfrutando del sol y la naturaleza. César siempre encontraba la manera de hacerme sonreír. Su sentido del humor y su mirada cálida me hacían sentir especial.

Nuestras noches de comida en restaurantes elegantes fueron momentos de conexión y romanticismo. César sabía cómo hacerme sentir especial.

Pero fue en la intimidad de la cama donde nuestra conexión se profundizó. César era un amante apasionado y atento, siempre buscando satisfacer mis deseos. Nuestras sesiones de pasión fueron inolvidables.

Sin embargo, también hubo momentos de tensión. Donde era distante con cosas  lo que me hacía sentir incómoda.

A medida que pasaba el tiempo, nuestra relación, si se le puede llamar relación, se intensificó. César se convirtió en mi compañero, mi amigo y mi confidente. Me sentí conectada a él de una manera profunda.

Pero ahora, después de tanto tiempo, siento que necesito reflexionar sobre mis sentimientos. ¿Es amor lo que siento por César? ¿O es solo pasión?

La respuesta solo la encontraré en el fondo de mi corazón.

•••

al recogerme de la universidad, no somos novios, ni amigos tenemos "algo", aún  no le hemos puesto un nombre, iba camino a la salida y lo vi parado en su auto, camine hacia el y me vio, pero me interrumpió un compañero del máster, Raúl, el ha sido amable, es de España y me ayuda con cosas que no entiendo, me detuvo para hablar sobre el próximo trabajo, estaba difícil, y pregunto si podia ir a mí casa para hacerlo, le dije que luego vería y le aviso, me dio un beso en la mejilla y me acompaño hasta el auto, la verdad no me lo esperaba pero la cara de cesar, era un verdadero poema, se veia molesto, cuando llegue...

- hola amor - dijo y me beso sin importarle que Raúl estuviera al frente, nunca me había dicho así, no dije nada, Raúl solo se fue, porque cuando nos separamos del beso ya no estaba, y cesar cambió, ahora me llamaba por mi nombre Tatiana.

y al subir al auto le dije con ironía.

- ¿ya no soy amor? - el solo empezó a discutir porque Raúl me tocó, porque hablo con el ,etc, hasta que llegamos a mí apartamento.

- nos vemos luego, gracias por traerme  dije sería, en ningún momento me dejó hablar en el auto.

- voy a subir - dijo saliendo del auto, no hice caso solo camine.

Abrí y entré, deja abierto sabía que venía detrás de mi.

- ¿no me vas hablar?, si tanto te gusta ese wey, me lo dices y ya - respiro mucho, demasiado.

- cesar,¿que es lo que quieres? - le digo sería - es un compañero, y tú y yo.... - me frustró - somos algo, pero no pareja - suelto molesta

- pusimos reglas - resopló

- exacto, yo puse reglas, tú no quisiste, ¡no soy de tu propiedad! - me exsalte

Sentí como me tomo de la cintura y me pegó a él, el enojo ahora eran nervios.

¿Que si cesar me pone nerviosa?, si lo hace, ¿Voy a para esta situación?, NO.

- Ahora quiero poner una sola regla - lo mire a los ojos - solo somos tú y yo, nadie más - sentí una corriente electrica rrecorrer mi cuerpo - no quiero qubenadie te toque - no pude evitar morder mi labio, y sonreír un poco.

- okey - puse mis manos en sus cuello, acariciándolo, y nos terminamos besando, pero solo un beso - ¿ya comiste? - pregunte al separarnos.

- no, te quería invitar, pero pues... - gire los ojos al recordar y me separé de él - ¿pedimos algo? - pregunto y negué.

- voy a cocinar, llama a lillian y preguntale si quieren venir a comer, aún es temprano - mire mi reloj y asintió.

Después de un rato volvió y me dijo que iría por ellos.

Haci que me puse a cocinar...

•••

Cesar

La lillian me dijo que si querían venir, pero el auto está en el taller, al parecer algo se le daño, eso lo voy a ver luego, mientras le dije que yo pasaba por ellos.

La neta si me encabrone cuando el vato se le acercó, pero... Pues no somos nada, solo tenemos un...¿Trato?, la neta no se, pero pues ahorita lo hablo con la lillian.

Llegué y vi parado a Omar, un amigo de nosotros pero más de mi gemelo, ¿que chingados hace este wey aquí?

Llamé a la lillian y le dije que bajara, y me dijo que menos mal, porque hace un rato vio una silueta de un hombre y le dio miedo.

Cuando bajo yo estaba fuera de mi auto, y Omar seguía al lado de las escaleras, cuando la vio se le acercó y ahí, me tiré en chinga.

- ¿cuando vamos a salir? - le pregunto muy cerca el idiota.

- Omar ya te dije que no, yo no quiero nada con nadie - dijo tratando de esquivarlo, pero no la dejaba pasar.

- ehh, wey la vas a dejar pasar o que pendejo - le dije molesto, y se veía que no sabía que estaba ahí.

- cesar, brou hace mucho no te veo - me entendió la mano y sonrió

- no soy tú hermano pendejo, y te quiero lejos de mi familia, más de lillian y mi sobrino - lo señale - tú me conoces Omar, no te metas conmigo - no dijo nada o mejor no le di tiempo, lillian ya casi llegaba al auto y le ayude con mi sobrino.

- Io - me dijo Dylan - ero edado - reí y mire a lillian quien veía por la ventana algo distraída.

- claro, más en la tarde vamos - el sonrió y segui el camino que era corto.

Llegamos baje a Dylan y subimos lillian adelante, y yo jugando con el a saltar escalones, como lo hacíamos yo y mi hermano cuando pequeños.

Cuando llegamos arriba lillian ya había entrado así que entramos y cerré.

- ¿que huele tan delicioso? - pregunte, la neta olía muy bien, me acerqué y vi algo, la verdad jamás en mi vida lo había visto - ¿arroz negro?

- es cabro - la mire igual de que antes - es una comida colombiana, espero les guste - me sonrió y le di un beso rápido, esto es a lo que me refiero plebes, ella lo hace porque quiere, y siempre está pendiente de lillian y mi sobrino,.

- enamorados podemos comer, ya es tarde - dijo lillian algo animada.

- si - respondió ella.

Todos comimos en calma, contamos muchas cosas, y era como, muyyyy cómodo, era.... Familiarrrr.

- que agusto me quedé - dije sentándome en el sofá y ella me miró mal.

- voy a lavar los platos - dijo lillian recogiendo, pero ella la detuvo.

- no me molesta tú cocinaste - la miró mi cuñada.

- tranquila - le sonrió - tenemos que hablar - mencionó y yo estaba atento a su conversación - parra yo cocine, te tocan los platos - dijo viéndome, la neta iba decir algo, pero... Si me asusta cuando se pone sería.

Solo me levanté y fui a hacerlo, y lillian se rió....mucho.








Estoy contigo, no sé porque, pero aquí estoy...

Att: T.v

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