| one shoots |

| 059 | Dillon Rupp

— ¿Dónde está Avery? — pregunta Dillon haciendo una voz extraña y agachándose para mirar debajo de la mesa del comedor.

Sigue haciendo la misma pregunta rotando entre el nombre de Avery y el de Zoe. Al final se deja caer en el sofá a lado mío mientras hace un sonido de cansancio. Río y cierro el libro que estaba tratando de leer.

— Creo que ellas ya no están jugando más conmigo.

— Bueno, yo pienso que tal vez ellas...— en ese momento las gemelas salen de detrás del sofá y se dejan caer encima de Dillon.

— ¡Eso es trampa! Yo estaba desarmado. Ustedes no tienen honor, niñas.— las gemelas lo único que hacen es soltar pequeñas carcajadas mientras tratan de escalar en el regazo de Dillon. Zoe se rinde más rápido y al final termina en mi regazo, Avery se acomoda y ambas nos miran con las mejillas rojas y pequeñas sonrisas en sus rostros.

— Ganamos, papi. ¿Eso significa que si habrá dulces? — pregunta Avery mirando a su padre con sus grandes ojos.

— No lo sé, eso fue una trampa muy grande. Creí que sabían las reglas del juego del escondite.

— Las sabemos, pero tú no nos encontrabas, papi.— Avery hace un puchero y sé que con eso ya ha ganado la batalla.

Zoe me hace una seña para que baje el rostro y pueda decirme algo al oído.

— Si papá no cae, ¿tu nos darías dulces, Rue? — río ante su pequeño complot y asiento mientras ella me muestra todos sus pequeños y blancos dientes mientras pone un dedo sobre sus labios en señal de que guarde el secreto. Asiento y ella baja de mi regazo mientras llama a su gemela, ambas salen dando grandes zancadas con sus pequeñas piernas.

Dillon se acerca más a mi cuando las niñas se han ido.

— Ellas acaban de hacer un plan de emergencia.— le digo cuando él ya me ha rodeado con sus brazos. Dillon sonríe contra mi cuello y yo paso mis dedos por su cabello.

De verdad amo a esas niñas. Son las gemelas de Dillon, las tuvo cuando era mucho más joven y desafortunadamente la chica que era su novia, Ally, tuvo grandes complicaciones en el parto y falleció. Nunca hubo problemas respecto a eso, me gusta ver a Dillon enseñándole fotos de Ally a las niñas. Yo lo conocí  poco tiempo después y fue realmente difícil verlo en esa etapa, solo, con dos pequeños bebés.

Dejarme entrar a su vida fue sumamente difícil, lo convencí de que podía ayudarlo a cuidar a las gemelas y poco a poco la relación se fue abriendo. Los padres de Dillon acababan de volver a reaparecer hace poco tiempo arrepentidos de no haberle prestado apoyo solo porque él era demasiado joven. Es obvio que quedaron encantados con Zoe y Avery ¿quién diablos no las amaría?

Siento los besos de Dillon recorrer mi cuello y sus manos adentrarse a su sudadera que yo solía usar para estar en casa. Río y lo aparto jalando suavemente los mechones de cabello que tengo entre mis dedos.

— Las niñas están corriendo por ahí, calma tu temperatura.— él suelta una risa y adentra su otra mano a la sudadera.

— Mi mamá vendrá por ellas dentro de un rato, las llevara a recoger hojas otoñales.

— Eso es tan lindo, cariño. Quizá deberíamos ir.— Dillon suelta un sonido de protesta y me sienta en su regazo.

— No, no entiendo que tengo que hacer para que entiendas que quiero un poco de tiempo a solas contigo.— suelta un suspiro dramático y sonrío solo para alzar el rostro buscando sus labios.

— Zoe tendrá recital de ballet el jueves.— digo contra sus labios.

— Ag, no hables de mi bebé mientras estoy teniendo pensamientos sucios contigo.

— Es un recordatorio, siempre olvidas las fechas.— río mientras tomo su rostro con mis manos.

— Eres increíblemente sexy, nena.— rodea los ojos y lo golpeo levemente en la mejilla.

El timbre suena y se escucha a las niñas reír y correr de regreso a la sala donde estamos nosotros, suben rápidamente y se aprehenden de nosotros mientras ríen.

— ¡La abuela! — gritan ambas solo para después bajarse y correr por sus abrigos. Ambos reímos y nos levantamos a ayudarlas a colocárselos.

Avery me mira fijamente varios segundos así que me agacho a su altura mientras le coloco su gorro rosa.

— ¿Qué sucede, cariño? — le pregunto mientras le coloco sus pequeños guantes.

— ¿Tu y mi papi tendrán un bebé? — me quedo congelada un segundo y giro a ver Dillon que se ha detenido en el proceso de colocarle sus botas a Zoe, ella también nos mira expectante.

— ¿Porque preguntas eso, bebé? — Dillon también se agacha a su altura.

— Nuestra maestra dijo que solo los grandes pueden tener bebés y que se necesitan dos personas que se quieran mucho, ¿tú quieres a mi papá mucho verdad, Rue?

— Claro que si, cariño.

— Es por eso que queremos un bebé, necesitamos alguien a quien enseñarle ballet y hay mucha ropa bonita que queremos mostrarle y también juguetes.— explica Zoe y ambos nos miramos y yo no puedo evitar sonreír.

— ¿No preferirían una muñeca? — ellas niegan rápidamente.

— No, tiene que parecerse a ti y a papi.— hay una sonrisa en mi rostro y de verdad siento que voy soltar a llorar en cualquier segundo.

— Vamos, cariño. La abuela está esperando.— Dillon toma la mano de Avery y la de Zoe y las lleva hacia la puerta; yo me encuentro estática en el lugar en el que me quede. Oigo unas cuantas palabras entre mi novio y su madre además de los gritos emocionados de las niñas. Después solo se oye la puerta cerrarse.

— No vimos eso venir.— Dillon se para en el marco de la puerta. Yo niego y sonrío un poco.

— Es lindo, me alegra mucho que me quieran, Dillon.— me acerco a él y lo rodeo con mis brazos.— Incluso si solo es como de fábrica de bebés.

El rie y besa mis labios.

— Podemos intentarlo.— murmura contra mis labios y lo miro sorprendida.— Piensa en lo divertido que será hacerlo.

— Muy bien, Dillon. Romántico.— él suelta otra carcajada y vuelve a rodearme en sus brazos.

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bonjour!
Segundo. Ojalá les guste. Mañana viene la tercera parte. Portada nueva! ¿Que opinan? Oh, y tenía un pequeño aviso. Quizá por primera vez en este libro me ausente durante la proxima semana. Son mis primeros exámenes en la Universidad y siento un poco de ansiedad, espero que todo salga bien y volveremos sin falta dentro de una semana, disfruten el pequeño maratón mientras tanto. Mucho amor a todos ustedes. Hasta mañana (: