Capítulo 17

142 7 0
                                    

Después de una de excursionismo por parejas (Lorena y Louis se habían adelantado compartiendo besos y tocamientos y Zayn y yo nos habíamos quedado un poco atrás mientras andábamos abrazados y riendo) llegamos a la cima de un improvisado sendero. Estábamos en medio de ningún lugar. Expresión que yo nunca entendí porque obviamente estábamos en algún lugar. En una montaña, en lo más alto. Sin ciudades, ningún edificio ni una sola casa, nada a la vista excepto nieve y árboles. El viento había tomado velocidad, lo más probable porque estábamos a más altura que antes. Espesos y gruesos copos de nieve habían empezado a caer. El cielo se había vuelto de un gris oscuro y el sol se había escondido.

Zayn me agarró de la cintura. Creí que iba a besarme y sonreí como una tonta. En ese momento escuché el sonido obturador de una foto acabada de hacer. Giré al cabeza y vi a Lorena con la cámara de Zayn. ¿En qué momento se la había dado?

―Oh, Dios…―Sollocé.

―Te lo dije―Me habló Zayn―No me gustan los poses.

―Creo que he salido con cara de tonta.

―Siempre pones cara de tonta cuando voy a besarte.

―¡Oye!―Le di un golpe en el pecho―Y ni siquiera me has besado. No es justo.

―¿Quieres que te bese? Sabes que lo haré encantado.

―Sí, por favor.

Rió sensualmente y agachó la cabeza para besarme otra vez. Oh, me encantaba que lo hiciera. Creo que era la cosa más fascinante que había visto, probado o sentido en mi vida.  Y es que besaba de una manera… Era tan sensual, tan provocativa pero a la vez tierna y perfecta que siempre, aunque nunca lo dijera, me dejaba con ganas de más.

Louis habló.

―Él viento está aumentado así que yo y Lorena empezaremos a bajar ya. Os recomiendo que no os quedéis muy atrás.

Alcé una ceja y miré a Lorena. Ella me zafó del brazo y me alejó de los chicos.

―Ya sabes cómo es Louis. Quizá me reclame una sesión de besos y tendremos que parar y escondernos detrás de unos árboles. Incluso a lo mejor quiere algo más y bueno, así Zayn y tú tenéis un tiempo libre y…―Contoneó sus cejas, yo gruñí.

―Zayn y yo no vamos a hacer nada que vaya más allá de los besos. Ni siquiera somos novios.

―¿Cómo que no sois novios? Creí que después de tanto romanticismo ya…

―No. No somos novios. Dejémoslo en que nuestra relación no tiene nombre, ¿vale?

―_____...

―No digas nada, por favor. Ahora no.

Lorena sopló.

―Está bien. No diré nada, pero ya sabes lo que pienso.

―Cariño―Louis se acercó a ella y la abrazó―¿Salimos ya?―Le besó la frente antes de que pudiera contestar.

―Claro―Respondió ella, aferrándose a él.

―Bien, vamos a ponernos los esquís.

Les regalé una sonrisa y me fui con Zayn. Cinco minutos después, estábamos él y yo solos en lo alto de la montaña.

―¿Lista?―Preguntó Zayn cuando ambos estábamos preparados.

―Mejor adelántate tú. Yo tengo más experiencia que tú en el esquí y te adelantaré en nada.

―No creo que esa sea la razón por la que quieres ir detrás.

―¿Y qué otra razón puede haber?

―No sé. Que así podrás mirarme el culo, ¿quizás?

Abrí la boca.

―Y si voy yo delante entonces serás tú el que me mirara el culo.

―Yo no te miraré el culo.

―No, claro que no. Pervertido.

―Pervertida.

Y ambos empezamos a reír.

Intercambio de SofásDonde viven las historias. Descúbrelo ahora