Capítulo 31

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―Sirope de chocolate, leche, azúcar, virutas de color, nata…―Zayn terminó de leer la lista de la compra―¡_____! ¡¿Falta algo más?! ―Me gritó desde el final del pasillo del supermercado.

―Mm… ¡Creo que no! ―Contesté― Aunque… ¡¿Tus raciones de besos hay que comprarlas?!

Zayn frunció el ceño y luego se acercó a mí mordiéndose el labio inferior. Cogió mi rostro entre sus manos.

―Por supuesto que no. Para ti son gratis―Se inclinó y me besó―Preciosa.

Sonreí como si fuera una niña con su nueva muñeca recién estrenada. Luego le metí la mano en el bolsillo del pantalón y saqué el papelito donde estaba todo el material que teníamos que comprar.

―Nos falta azúcar glaseado y luego hay que buscar esa carne que necesitas para cocinar ese plato típico de tu país―Le informé.

―Oh, cierto―Recordó―Ves yendo a la cola para pagar. Yo me encargo de ir a buscar eso en un momento, ¿sí?

Asentí con la cabeza y dejé que se marchara mientras yo arrastraba el carro hasta la caja y empezaba a sacarlo todo para que la dependienta pudiera decirme cuanto había que pagar.

El resto de la tarde nos dedicamos a fabricar los brownies y algún que otro dulce para llevar a casa de Lorena al día siguiente.

La cocina quedó hecha un desastre. Zayn se dedicó a llenarme la nariz de chocolate y finalmente terminé con sirope en toda la cara, en los brazos e incluso en el interior de la camiseta. Cogí el bote de nata y empecé a llenar a Zayn de pasta blanca por todas partes. Le formé una barba como la de Papá Noel y como consecuencia, Zayn se me echó encima y comenzó a besarme por todas partes. Terminamos en el suelo, hechos unos cerdos. Zayn me levantó la camiseta y empezó a lamerme todo el chocolate que había en ella, luego me echó más nata y estuvo un buen rato haciéndome cosquillas. Finalmente acabamos los dos en la ducha, frotándonos intensamente con las esponjas cargadas de jabón para quitarnos de encima cualquier rastro de dulce que quedara enganchado a nuestra piel.

Al acabar la tarde, cerca de las nueve de la noche, me quedé dormida en el sofá sin siquiera cenar. Estaba agotada. Zayn me cogió en brazos y me llevó a la cama.

Intercambio de SofásDonde viven las historias. Descúbrelo ahora