a noche era oscura. Hacía frío y apenas se oía algo más que el ruido de los búhos perdidos entre las copas de los árboles que formaban bosques espesos a lado y lado de la carretera. ____ se abrazó a sí misma y suspiró.
―¿Estás bien? ―Volvió a preguntarle Harry por enésima vez.
Ella asintió débilmente con la cabeza.
―Sí, estoy bien.
Pero no lo estaba, y Harry lo sabía perfectamente. Había conseguido que la herida en la frente de la chica dejara de brotar, pero aún así, ____ seguía algo inconsciente respecto a lo que estaba ocurriendo y se sentía perdida y desolada.
―Te estás quedando helada. ―Replicó Harry―Creo que tengo un jersey ahí atrás―Se dio media vuelta en el asiento y alcanzó algo que ___ no pudo ver claramente hasta que Harry se lo colocó frente a sus narices―Póntelo.
____ obedeció sin rechistar.
Se pasó la prenda de ropa por la cabeza y al momento percibió la esencia varonil de Harry. Se acomodó el jersey y se acurrucó en sí misma.
Harry la miraba. De hecho, no había dejado de mirarla en todo el tiempo. Tuvo el impulso de colocarle una mano en el muslo y acariciarla. ___ se sobresaltó y lo miró con los ojos abiertos como platos.
―…¿Qué haces?
―Lo siento―Murmuró él―Quizá debería, simplemente, haberte llevado a tu apartamento y yo haber vuelto al mío. Nada de esto habría pasado…
―No te lamentes ahora, Harry―Le reprochó ella.―Conduces de pena.
―¿Qué? ―Él la miró consternado―El accidente ha sido por tu culpa.
―¡Yo no era la que conducía, estúpido!
―Pero estabas molestándome. ¡Me estabas golpeando!
―Mentiroso.
―Deja de insultarme, ¿de acuerdo? ―Le pidió él en tono recto. ―Estamos…
―No lo haría si no fuera cierto―Se acomodó en su asiento y, apretando los labios con fuerza, se cruzó de brazos, como si estuviera realmente molesta con él.
Harry abrió la boca y la miró sorprendido.
―No puedo creerlo. ¿Estás enfadada?
